Yolanda Durán, la titular de Cedeapsa, que es una de las cámaras que agrupa al supermercadismo chino, estimó que “no hay estabilidad de precios” lo que hace que la gente “compre lo justo”, y calculó que la demanda en este sector del comercio minorista bajó cerca del 10 por ciento.

En diálogo con radio La Red, Durán se refirió al nivel inflacionario y dijo que “el tema de los precios viene bastante salado todavía. No tenemos estabilidad, continuamente vienen con aumentos y por ende tenemos una baja bastante importante del consumo”.

Al describir la situación en las góndolas, dijo que “la gente se lleva lo imprescindible. Recibimos precios con aumentos y nos bajaron las ventas y encima nos empezaron a llegar las boletas de luz con 150 por ciento de aumento».

«Pagábamos 4.000 pesos y nos llegan boletas por 10 mil pesos. Y dicen que el mes que viene va a venir entre 16 mil y 18 mil pesos. Si no pagamos, nos cortan la luz y los productos perecederos se nos echan a perder. La luz es imprescindible para iluminar y mantener las heladeras”, explicó.

Estimó que ante esta situación “el Gobierno tendría que mirar un poquitito, los más chicos tendemos a perder”, dijo al aludir al supermercadismo chino en contraposición con las grandes cadenas de supermercados.

“No tenemos capacidad financiera para hacer frente, para volver a reacomodarnos en los precios para cuando la gente tenga dinero nos vuelva a comprar y gaste más”, argumentó.

Durán describió el cambio de hábito en las compras diarias, y dijo que “antes la gente compraba dos artículos de cada producto, ya sea gaseosas o paquetes de fideos, y ahora compran lo justo. Ahora se lleva lo necesario, lo del día”.

Al poner un número a la comercialización dijo que “cayeron las ventas, y según los supermercadistas fue más de un 10 por ciento. La gente viene a comprar un paquete de fideos para la comida del día. Hoy se llevan lo
necesario”, señaló.

Describió que anteriormente la compra en locales de carnicería o verdulería en el propio supermercado chino traccionaba el resto de las ventas. “Pero ahora no. La carne aumentó y la gente no viene a comprar, ni tampoco lo hace con el resto de las cosas”.

Al reflexionar sobre porqué los proveedores alzan el precio de sus productos, dijo que “mientras que aumente el combustible, la luz, los impuestos, los sueldos, es lógico que aumenten, todo se carga al costo del producto”.

Estimó que en el aumento del precio de los productos hay subas genuinas y especulación, y reflexionó que algunos empresarios proveedores “son rápidos para aumentar automáticamente los precios por suba de costos pero no para prorratear esos incrementos”.

Durán estimó que “tiene que haber previsibilidad para seguir trabajando. Hoy tenemos incertidumbre, no sabemos si abrir más bocas. No sabemos qué hacer. Pero hay que seguir apostando al país. Seguiremos invirtiendo, buscando locales. Ojalá que se frene todo esto de una vez por todas y que tengamos una inflación razonable, ya que hay tantos vivos en el sector”.