Los productores agropecuarios del norte del país, que se desempeñan en la zona del noreste y noroeste del país, emitieron un comunicado donde denunciaron que el gobierno nacional tiene una «falsa voluntad de diálogo» con el sector.

En diciembre pasado, los productores realizaron un paro de comercialización durante dos días. Esta medida de fuerza derivó en un encuentro con el Ministro de Agricultura de la Nación, Luis Basterra, donde pudieron exponer su problemática, pero desde el sector afirman que sólo se trató de una charla y que no se tomaron las medidas solicitadas.

“Este Gobierno no hace más que entretenernos, poniéndonos a alguien delante con capacidad política y de diálogo. De esa manera mantienen los ánimos calmados del productor, pero al seguir sin una respuesta concreta tenemos que tomar otras medidas”, expresó el vicepresidente de la Asociación de Productores del Norte (Apronor), Roberto Palomo, al medio Bichos de Campo.

En este sentido, aseguró que hay grandes posibilidades de que el próximo viernes 21 de febrero se realice una nueva asamblea para definir un plan de lucha entre todas las provincias del norte y consideró que la situación «no da para más» y que “el diálogo con Basterra está agotado».

El titular de Apronor indicó que la fecha de siembra lleva un mes atrasada, por lo que los rendimientos de la cosecha, que se haría entre abril y mayo, ya no serían los óptimos y la rentabilidad se ve comprometida. Además, destacó que la depresión que sufren los precios internacionales más la caída en la rentabilidad afecta considerablemente al sector.

Finalmente, Palomo expresó que participarán de la reunión que realizará esta semana la Mesa de Enlace y que de realizarse un paro nacional, el sector se sumará. No obstante, destacó que si en la reunión no se toma ninguna medida, los productores del norte definirán las estrategias de lucha por su cuenta.

En el encuentro que los productores mantuvieron con Basterra en diciembre pasado, le plantearon que era injusto que quienes se encontraban a más de mil kilómetros de los puertos paguen las mismas retenciones que aquellos que se ubican más cerca. El ministro, en tanto, se comprometió a hacer una «diferenciación territorial» en cuanto a retenciones.