Por Aldo Battisacco desde Buenos Aires (enviado especial)
El secretario General de la Confederación General Empresaria de la República Argentina, Raúl Zylberstein, indicó que “la solución al problema del mal crónico de Argentina, el déficit fiscal y la inflación no es monetario, o si lo es, puede serlo por un corto periodo de tiempo”.
En diálogo con Conclusión el empresario dijo que “sin un plan de generación de riqueza, de industria anclada a los recursos naturales y a la tecnología, solo tendremos una economía para la deuda». Y añadió; «El tipo de cambio no puede ser la única variable de competitividad, debemos ir hacia una economía que nos de varias herramientas de competitividad y así hacer permanente el crecimiento industrial”.
Por otro lado, Zylberstein llamó la atención al gobierno al analizar que “el objetivo de la lucha contra la inflación que estableció el gobierno es fundamental, y no está mal replantearse las metas inflacionarias, pero también hay que replantear las medidas económicas que llevaron a no cumplir los objetivos: ahorro en personal, quita de subsidios a los servicios públicos, subas en las tasas de interés y apertura de las importaciones, solo trajo enfriamiento de la economía, caída de la recaudación y aumento del déficit”.
Consultado acerca de la herramientas a las que apeló el oficialismo para dar respuesta a la inflación, el empresario contestó que «enfriar la economía para terminar con la inflación es como curar un cáncer matando al paciente -comentó el secretario General de Cgera- al abordar el plan llevado hasta ahora por el Banco Central. «Simplemente no funcionó y el pueblo aguantó el ajuste, con tal de mejorar la situación, pero el clima social no parece que vaya a seguir aguantando mucho más», apunto el directivo.
Preguntado de como evaluaba la quita de subsidios, Zylberstein señalo que “vino por medio de una feroz suba de los servicios públicos y transportes, produjo un ahorro importante, que no tuvo su correlato en la baja del déficit, pero avivó una disparada inflacionaria con recesión, ya que el aumento del gasto de una familia en los servicios básicos restringe la compra de otros productos”, amplió al respecto.
Además precisó que: “La suba de las tasas de interés, detuvo la producción y cualquier forma de inversión productiva, por quita de rentabilidad, a todo ese combo se suma la casi nula restricción del comercio exterior, con la idea de que los precios baratos de la mercadería a nivel mayorista impactarían a nivel minorista. Esto no ocurrió, porque el problema mayor está en toda la cadena comercial y no en la industrial, con gastos de intermediación, inmobiliarios, y de los servicios financieros, y la carga tributaria local”.
Por último, Raul Zylberstein volvió a destacar que “la solución de este problema no es monetaria. Cambiando plata de un lugar a otro, poniendo tal o cual tasa de interés. La solución es crear riqueza, tener una producción de bienes y servicios que sirvan para consumir lo que necesitamos, exportar valor agregado y acumular riquezas». concluyó.
