El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, anunció hoy que el déficit fiscal primario del primer trimestre fue menor al proyectado, en gran medida por los ingresos del blanqueo de capitales, y advirtió que «si la recaudación no crece todo lo esperado» se recortará el gasto público.

En conferencia de prensa, anunció que las cuentas públicas arrojaron un déficit fiscal primario del 0,4% del PBI en el primer trimestre del año, al sumar 41.344 millones de pesos, que mejoró el objetivo fijado en 0,6%.

Así lo informó el ministro de Hacienda, quien garantizó que este año el Poder Ejecutivo logrará llegar al déficit del 4,2% anual, tal como fue aprobado en el Presupuesto Nacional. En el resultado del primer trimestre tuvo un alto impacto el blanqueo de capitales que terminó el 31 de marzo, ya que sin esos ingresos extra el déficit de los primeros tres meses hubiese trepado a 76.300 millones de pesos, según estimó el director de la consultora Prefinex, Nicolás Bridger.

Indicó que si la recaudación no crece lo esperado «el gasto también crecerá menos, ya que la prioridad es que se cumpla la meta del 4,2%».

En ese marco, el titular de Hacienda comentó que durante el año pasado «fue muy difícil planificar (las cuentas públicas), ya que veníamos de un período de mucha corrupción. Ahora tenemos una economía más estable que en 2016».

El reporte fiscal exhibido por Dujovne exhibió también que, en el primer trimestre del año, los ingresos fiscales totales aumentaron 41% interanual, frente a un incremento del gasto total en el orden del 35%.

El ministro puntualizó que las prestaciones sociales y la inversión en infraestructura fueron los sectores que registraron un mayor aumento del gasto. «Queremos ser muy prudentes con el gasto público y pretendemos que las provincias también lo sean. Hay señales que algunas de las políticas de prudencia fiscal empiezan a impactar en los números. Estamos haciendo un mejor uso del gasto», se entusiasmó el ministro.

Dujovne asumió en la cartera de Hacienda en diciembre último, tras la salida de Alfonso de Prat-Gay, con el objetivo de revisar exhaustivamente las cuentas públicas para reducir un déficit abultado entre las prestaciones sociales, la quita de retenciones y condonaciones a empresas.