Uno de los sectores que, debido a la crisis económica, fue muy afectado por la suba indiscriminada del dólar, es el rubro de ventas de repuestos de autos y talleres mecánicos. Los vendedores de autopartes también se ven perjudicados. Tanto talleres como locales afirman que intentan no aumentar demasiado los precios para que no merme más la venta.
Más del 70% de los insumos de un automóvil son importados, por lo que la divisa estadounidense afecta en gran medida al sector. Tratan no elevar en gran medida los precios, pero la baja en la actividad es significativa.
Conclusión dialogó con el presidente de la Asociación Talleres de Reparación Automotor y Afines Rosario (ATRAAR), Salvador Lupo, para consultarle sobre la situación que atraviesa el rubro y cómo afectó el alza de la divisa norteamericana al sector.
“Veníamos bastante mal porque hay una retraso del 30 por ciento en la actividad nuestra y esta suba nos perjudica muchísimo, más porque no sabemos los precios. Hay lista de precios que rondan entre el 20, 25 y 30 por ciento de aumento. El lunes te vendían sin precio los proveedores y no podemos trabajar así”, mencionó Lupo sobre la situación vivida tras la escalada del dólar.
Al consultarle sobre la visión que tiene como responsable de la institución sobre esta crisis, el representante de los talleristas explicó que “nosotros participamos en la Asociación Argentina de Talleres y la verdad que todo el país está pasando lo mismo. La gente no tiene dinero, los talleres no reciben dinero y no les alcanza. Pero lo que más nos preocupa es la gente que trabaja en los talleres. Es bastante costoso todo lo que necesitamos para seguir funcionando como taller”. Y agregó: “No queremos ganancias extras, sino ver como hacemos para mantenernos y ese es el problema más grave”.
La suba del dólar afectó el sector de repuestos y reparación de automóviles, ya que la mayoría de los materiales son traídos desde el exterior. Lupo explicó que “más del 70 por ciento de los productos que tiene un vehículo son importados, o sea, el dólar influye muchísimo en la actividad nuestra. Lo que hacemos es tratar de defender al cliente, mantener los puestos de trabajo y sobre todo tratar de defender esta pequeña empresa que tenemos todos los talleristas hasta ver si en algún momento esto se arregla”.
“La verdad que nosotros no somos políticos pero estamos inmersos en una situación que nos perjudica muchísimo. La actividad bajó, nos cuesta mucho mantenernos, vamos a tratar de proteger las fuentes de trabajo y defender esto que es nuestro recurso para seguir viviendo”, concluyó el presidente de ATRAAR.
La realidad de los autopartistas
Conclusión habló con los comerciantes que se encargan de vender los repuestos de autos, para consultarles cómo viven esta realidad de la economía argentina.
Un vendedor contó que “la empresa decidió mantener los precios y ver como cierra el dólar, esperar hasta el lunes para ver como se comienza la ganancia. Creemos que es la manera más correcta”.
El dueño de un local autopartista, explicó lo difícil que es la relación con los proveedores, debido a que “primero no entregan la mercadería y segundo no hay precios de guía. Lo que nosotros hicimos es sostener el precio que estaba, hasta que nos envíen una lista de precios nueva”, lo que complica sostener las ventas, ya que no existe referencia de los precios.
“Aparte del aumento que proponen, nosotros no podemos aplicar esos aumentos a la gente. Siempre aplicamos la mitad porque es imposible cobrarle lo que ellos nos dicen a los clientes. Igualmente algunos especulan y no entregan mercadería. Nada hizo que no hubiera mercadería. Esperan un par de días para especular”, aseveró uno de los comerciantes.
