El fiscal general Germán Moldes apeló hoy el fallo de la Cámara Federal que ratificó el rechazo de la denuncia del fallecido fiscal Alberto Nisman contra la presidenta Cristina Kirhcner por presunto encubrimiento de la investigación de la AMIA.

Fuentes judiciales informaron que pasado el mediodía Moldes presentó un recurso extraordinario para que la Cámara Federal de Casación Penal, máxima instancia de esa materia, evalúe si se debe dar curso o no a la denuncia de Nisman.

La denuncia había sido rechazada en primera instancia por el juez federal Daniel Rafecas y luego por la Sala I de la Cámara Federal.

Moldes pidió el «pronto despacho» y la «urgente elevación» a la Cámara Federal de Casación Penal para que se defina la suerte de la denuncia de Nisman.

Según el fiscal general -uno de los más enfrentados con el Gobierno y convocante de la marcha del 18 de febrero pasado- la denuncia de Nisman es «apta para generar la correspondiente actividad jurisdiccional» pues los hechos «podrían configurar delitos».

Moldes aludió a la supuesta existencia de «negociaciones paralelas a las oficiales», así como la «existencia de un plan oculto, vidrioso para los objetivos e intereses de la Argentina, que beneficiaría a otro Estado y a cinco de sus ciudadanos».

En ese sentido hizo alusión a los funcionarios iraníes que cuentan con pedidos de captura por parte de la Justicia Argentina, como sospechosos de volar la AMIA el 18 de julio de 1994.

«También debe quedar en claro que no estoy en condiciones de emitir, aquí y ahora, juicios de valor sobre la entidad criminalde los hechos referidos o sobre su inocuidad frente al derecho penal», dijo Moldes en su escrito.

Y agregó: «sólo pretendo en representación del Ministerio Público que se permita ahondar en el conocimiento de los hechos referidos en el requerimiento de instrucción con el fin, único y último, de erradicar cualquier duda o inquietud que sobre ellos pueda albergarse. Antes de opinar hay que conocer los hechos».

Moldes explicó que no se pretende «analizar el contrapunto político que subyace en toda negociación tendiente a llegar a un acuerdo de voluntades entre agentes de Estados soberanos» sino analizar si en esa relación hubo un delito.

«Estamos tratando de averiguar si en esa relación interesada, en esos cruces para resolver un asunto de común interés, ha existido algún propósito o alguna intención que sí pueda quedar –por cómo se ha expresado o por cómo puede haber sido compensada- dentro de las conductas que prevé el catálogo
represivo vigente», precisó el fiscal.

Asimismo, Moldes también recordó que el fiscal Gerardo Pollicita al requerir una investigación, desestimada por Rafecas, pidió una gran cantidad de medidas de prueba.

«Frente a una denuncia que presenta visos de seriedad, el Ministerio Público habilitó la investigación de un posible delito de acción pública y propuso para despejar las dudas que existen sobre la entidad criminal de los hechos referidos la realización de una batería de medidas útiles y conducentes. El error fue no considerar la validez y entidad de la denuncia y del requerimiento de instrucción que se hace parcialmente eco de ella, y desde esa limitada visión del expediente adoptar una resolución que impide sin motivos valederos la labor del Ministerio Público», agregó.

La apelación de Moldes será evaluada ante la Cámara Federal que definirá si concede o no el recurso, caso contrario le queda al fiscal la posibilidad de interponer un recurso de queja.

No obstante, aún resta que la Cámara Federal defina un pedido de recusación del canciller, Héctor Timerman, contra el fiscal Moldes por supuesta falta de objetividad.

Nisman, en los primeros días de enero y antes de aparecer sin vida en su departamento de Le Parc, denunció a la Presidenta; al canciller; al diputado oficialista Andrés Larroque; al dirigente Luis D´Elía; al ex juez Luis Yrimia; al líder de Quebracho, Fernando Esteche; al supuesto espía Ramón Allan Bogado; y a Jorge Khalil, entre otros.

Por su parte, el ex ministro de la Corte Suprema de Justicia, Eugenio Zaffaroni, aseguró hoy que «dentro de la justicia federal da la impresión que ha habido resortes racionales», al destacar el pronunciamiento de la Cámara Federal porteña que desestimó la denuncia presentada por el fallecido fiscal Alberto Nisman contra la presidenta Cristina Fernández de Kirchner por presunto encubrimiento del atentado a la AMIA.

En declaraciones formuladas en Neuquén a radio Universidad-CALF, Zaffaroni aseguró que «menos mal que da la impresión que eso se para un poco, da la impresión que dentro de la justicia federal ha habido algunos resortes racionales porque de lo contrario es un proceso de partidización de la justicia pero que termina en una catástrofe para el Poder Judicial».

Calificó como un «avance» el fallo de la Cámara Federal «al decir, paremos porque esto es un disparate, porque esa partidización ensucia a todo el resto».

El ex ministro de la Corte, aseguró que «cuando uno lee el escrito que dejó Nisman firmado, que motiva la acusación, se da cuenta que eso no lo hizo Nisman, que eso no lo pudo hacer un abogado, que eso es un disparate; es un caos el escrito», sentenció.

Dijo que «mínimamente cualquier funcionario judicial tiene una idea de cómo se estructura un escrito, dónde van las cosas. Un escrito es como una casa, puede que no sea un teórico, que no tenga un conocimiento profundo del derecho, pero conocemos el estilo».

«Nunca pudo Nisman firmar eso, hay una injerencia rara que hubo ahí» y opinó que «el hecho es una tentativa de golpe de Estado blando propia de esta fase avanzada del colonialismo, es una tentativa de desestabilizar al gobierno».

Zaffaroni respaldó la propuesta para que Roberto Carles sea designado miembro de la Corte Suprema de Justicia.

«Me parece un magnífico candidato, un tipo joven, preparado, con ganas, no cansado como nosotros que ya estamos un poco veteranos».

Destacó que «en la función después de unos cuantos años uno se va cansando, se va repitiendo, pierde creatividad, de modo que sí creo que poner un pibe es importante».