Por Aldo Battisacco – Enviado especial a Buenos Aires  – Mas allá de la movida política que generó el anuncio de Cristina Fernández de Kirchner, de que su compañero de fórmula será Alberto Fernández, las causas en su contra avanzan en Comodoro Py y promete que la foto que busca el gobierno -de ver a la ex mandataria en el banquillo de los acusados- prosperó al ritmo que impone el almanaque electoral.

El juicio oral a Cristina Kirchner, al ex ministro de Planificación Julio De Vido y otros once acusados de ser parte de una presunta asociación ilícita que favoreció al empresario Lázaro Báez, con la adjudicación de 52 obras públicas en Santa Cruz entre 2004 y 2015 por 46.000 millones de pesos, comenzará el martes, se extenderá por casi un año y contará con la declaración de unos 160 testigos, comenzará el próximo martes,

En diálogo con Conclusión, el senador nacional por Neuquén, Marcelo Fuentes, señaló respecto de las decisiones judiciales, que se trata «de dos planos que están profundamente unidos, la descomposición de la política tal como lo trasunta el gobierno actual, que parece que va con uno y con otro, que produce un juego de confusión mediática. Y el otro es el deterioro de la Justicia en Argentina, asistimos a una injerencia grosera, pocas veces vista del Poder Ejecutivo en decisiones que son propias del Poder Judicial».

Según Fuentes, «la Corte pega una voltereta receptando las presiones que se había ocasionado, todo en función de creer que una campaña se lleva adelante -con un resultado eficaz- logrando una foto de la senadora ante un tribunal».

El legislador disparó contra el gobierno y describió los resultados del avance de la investigación que lleva adelante el juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, al referir que «en las causas consta la existencia de operaciones de inteligencia, participación de funcionarios judiciales, agentes y autoridades de la AFI, diputados que indica que en el marco de un orden jurídico normal, estarían viciadas de nulidad».

Para el parlamentario, con esto se busca un efecto, que tiene por objeto «la propaganda política, pero también con la finalidad de generar zozobra, y angustia sobre la población, que padece innumerables problemas producto de las consecuencias nefastas de las políticas económicas, el deterioro del salario y de las jubilaciones, despidos y cierre de fábricas, le suman este bombardeo constante de noticias que producen un juego que demuestra el grado de descomposición del oficialismo que encuentra estos mecanismos salvajes para sobrevivir políticamente».

«Estamos en medio de una estrategia del Gobierno que es corta, la causa de la fotocopias se fue preparando y armando para lanzarlas en este momento, cuatro meses antes de las elecciones, con la intencionalidad de lograr un efecto mediático. Para tapar la desastrosa crisis financiera y la corridas que precipitaron apurar esta operación de distracción», apuntó el jefe de bloque del Frente para la Victoria.

Edward Prado – Embajador de Estados Unidos

«Pocas veces hubo una elección en las que -creo que desde Braden o Perón- donde se detecta una injerencia externa y grosera como la que se ve del gobierno de Estados Unidos, y no sea cosa que en esta desesperación de poder encontrar algo, y sin el efecto mediático que desearon, son capaces e cualquier juego para no llegar a elecciones», expresó el neuquino y agregó «como crear escenarios con salidas de asamblea legislativa, no hay que confundirse. La única herramienta cierta para poner un coto a este gobierno es votando en octubre».

Marcelo Fuentes alertó que hay sectores inquietos que son parte del bloque hegemónico de poder, que pueden caer en la desesperación de no prosperar la candidatura de Macri, y manifestó: «Son capaces de cualquier cosa, y una de las respuestas es proponer una asamblea legislativa, que apunte a dar entidad a un estado de emergencia que evite llegar a las elecciones en octubre».