El jefe del interbloque Argentina Federal en Diputados, Pablo Kosiner, recomendó que se analice los términos del acuerdo Mercosur-Unión Europea, para incorporarle modificaciones que tengan en cuenta la realidad de algunos sectores productivos, que podrían resultar dañados en el futuro.
Sobre el particular, el salteño destacó que el acuerdo “no es bueno o malo en sí mismo”, y que estará sujeto a los «recaudos que se tomen» para hacerlo efectivo.
Kosiner dimensionó que existe la necesidad de que la “envergadura» del acuerdo «amerita que se ponga en conocimiento del Congreso el contenido del mismo y las características, porque es un acuerdo bastante complejo”.
Por otra parte, el legislador de Salta, quien además preside el bloque Justicialista en la Cámara baja, firmó una nota para convocar a los ministros Jorge Faurie (Relaciones Exteriores) y Dante Sica (Producción y Trabajo) y dar explicaciones sobre lo actuado por la Cancilleria, señaló que “el Gobierno ha reducido la noticia casi a un efecto inmediato”.
En la misma línea, refirió que “se abre todo un proceso de negociación” que demandará tiempo, además de que existen “posturas diferentes de los países” al respecto. “La redacción fina puede llevar meses a un año”, agregó.
El precandidato a diputado por Consenso Federal se diferenció del kirchnerismo y dijo que “no es muy bueno decir que no sirve para nada, por algo todos los presidentes, incluso Cristina Kirchner, trabajaron para cerrar este acuerdo”.
Sin embargo, aclaró “el acuerdo no es bueno ni malo en sí mismo, todo depende cómo sea el proceso de integración de Argentina, qué recaudos se tomen”.
Para dar una noción de las asimetrías que se pueden encontrar los negociadores a futuro puntualizó que “No se puede tomar en igualdad de condiciones a un industrial argentino con uno francés, italiano o español”, al tiempo que abundó que la agenda debe contemplar reformas en el “sistema tributario, el sistema de financiación y el tema de la logística”.
