Enviado especial a Buenos Aires.- La noticia fuerte de este miércoles en el Senado fue la falta de quórum en la sesión para tratar la autorización de los allanamientos a Cristina Kirchner ordenados por el juez federal Claudio Bonadío.

Pasada media hora de las 14, sólo había 36 senadores presentes en las bancas de la Cámara Alta, uno menos de los necesarios (mitad más uno) para abrir la discusión.

Momentos más tarde, el senador nacional Miguel Ángel Pichetto, declaró que le pareció “un error, desde el punto de vista de la imagen política del Senado, no habilitar una medida judicial ordenada por un juez que está investigando un tema que es de trascendencia”.

“Creo que es una medida de prueba que no hay que impedir, y en este sentido creo que hay que acceder a hacerla”, manifestó el jefe del bloque justicialista, que a su vez aseguró que no comparte ni aprueba “un eventual pedido de detención”, sino que “tiene que haber una sentencia firme” y que no es partícipe de “justicias mediáticas”.

Consultado por Conclusión acerca de cual debe ser la respuesta que el Estado debe dar en estos casos, el senador rionegrino respondió que “Los procesos judiciales en Argentina habrá que acelerarlos, habrá que acortarlos, trabajar con darles mayor rapidez y certeza, pero tampoco creo ni soy partícipe de justicias mediáticas, en orden a lo que significa alterar el instituto de la prisión preventiva que se tiene que dar en dos casos muy concretos: el peligro de fuga e impedir la eliminación de pruebas desde alguna posición de poder para evitar que el juez avance. Ese será otro debate”, expresó Pichetto.

En ese sentido, aseguró que la falta de quórum genera “una afectación a la imagen institucional” del Senado y que “hubiera sido importante tratarlo y resolverlo”, aunque no se sorprendió por la cantidad de ausencias ya que “fue la misma que en la sesión anterior”.

Preguntado por este medio respecto de si los senadores creen necesaria la elaboración de algún tipo de normativa, Pichetto respondió que no cree que “haga falta”, y que en su visión distingue en la ley de fueros dos etapas: “Una es la inmunidad de resto, que es muy claro, donde está el rasgo constitucional de los dos tercios, y éste es un tema que incorpora el legislador cuando se debate la Ley de Fueros en razón del escándalo del Senado, en orden a permitir que la investigación avance desde el primer día hasta el último”.

“Yo lo que quiero remarcar siempre es que no hay ningún impedimento para que los jueces puedan avanzar, llevar a la ex presidenta a juicio oral, que se pueda defender, que pueda haber una sentencia, que esa sentencia sea recurrida ante la casación, y recién cuando la casación retifique o no la condena se agote la instancia por denegatoria del recurso extraordinario y ahí sí la sentencia tiene principio de cosa juzgada. ¿Cuánto puede durar este proceso? Hay un hecho muy reciente, que tiene que ver con la causa Once, que fue realmente un período muy corto. Entre la instrucción, y el juicio oral, en menos de dos años se logró una sentencia condenatoria. Hay procesos que duran diez años y otros que si se hacen con eficacia pueden durar mucho menos. El Estado de derecho tiene que ver con el cumplimiento de normas. Guste o no. La prisión preventiva es para casos extremos, como por ejemplo si se va a fugar”, se explayó el senador justicialista.

Finalmente, sobre los allanamientos en sí, consideró “desde el sentido común” que “es muy difícil que (Bonadío) encuentre algo”.

Sólo ocho de los 24 senadores del interbloque Argentina Federal, conducido por Pichetto, se presentaron en las bancas. Del bloque Cambiemos estuvieron presentes 23 de 25, dato importante a la hora de pensar en que sólo faltó uno para dar quórum. Al mismo tiempo, un senador progresista estuvo presente, pero se fue.

Por Argentina Federal, además de Pichetto dieron el presente Carlos Caserio (Córdoba), Omar Perotti (Santa Fe), Carlos Camau Espínola (Corrientes) Rodolfo Urtubey (Salta), Dalmacio Mera (Catamarca), Mario Pais (Chubut) y Eduardo Aguilar (Chaco). Del ex interbloque Federal asistieron Cristina Fiore (Salta), Lucila Crexell (Neuquén) y Carlos Reutemann (Santa Fe) y también acudió la misionera Magdalena Solari. El caso particualr fue el del porteño Fernando «Pino» Solanas fue particular, quien llegó, se sentó, pero luego se levantó de su banca.

El Senado volverá a tratar este tema en sesión el miércoles que viene, donde nuevamente necesitarán conseguir el quórum para habilitar el debate.

La Ley de Fueros (25.320) indica que el Senado debe autorizar o no mediante su voto al juez Bonadío para realizar los allanamientos a la ex presidenta y actual senadora Cristina Kirchner ordenados en el marco de la «Causa de los Cuadernos».