Fiel a los comentarios que corren con vértigo entre los pliegues del poder, el ex ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay, hizo gala de su comentado egocentrismo al disparar munición gruesa contra varios de los ministros del gobierno nacional (según señaló el periodista económico Alejandro Bercovich), y especialmente sobre el de Energía, Juan José Aranguren y el de Interior, Rogelio Frigerio.
«Se terminó, ya está. Con estos pelotudos no podía hacer más nada», sentenció el saliente funcionario.
Más allá de las características propias de su personalidad, el periodista de BAE dijo que “lo que convenció a Prat Gay” fue que “en el quinto piso del Palacio de Hacienda tenía menos poder que en el Banco Central en 2004, cuando se divorció de Néstor Kirchner algo más tensamente que ahora de Mauricio Macri, fueron dos decisiones del último mes: la de flexibilizar su proyecto de reforma del impuesto a las Ganancias y la de pactar con las petroleras cuatro subas de combustibles para 2017”.
No obstante, el ex funcionario del gobierno de Cambiemos dejó expuestos los saludos en su cuenta de Twitter: “Mi mejor deseo de éxitos a @nicodujo a Toto y al presidente @mauriciomacri en esta etapa que inician hoy”, en alusión al nuevo ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne y al también flamante de Finanzas, Luis Caputo.
La invitación de la UCR
Ninguna decisión queda jamás librada al azar en la política. Una vez que Prat Gay dejó de ser parte del gobierno, fue invitado por la Unión Cívica Radical a participar de la reunión que los referentes partidarios de esa fuerza política tendrán en Villa Giardino el próximo 17 de febrero.
Su enfrentamiento con miembros del gobierno que hasta hace días integró puede servir para fortalecer, al menos en los mensajes de verano, la posición que el partido creado por Leandro N. Alem dentro de la alianza gobernante.
Es posible y esperable centralización de las decisiones en el gobierno nacional, lo que hace presumir que la UCR no cederá un centímetro en sus pretensiones de mantener, y hasta ampliar, sus espacios de poder, bajo el histórico argumento de que son ellos quienes tienen legitimada la representación territorial.
Será decisión del propio Prat Gay aceptar el convite y reciclarse en un nuevo esquema de poder que empieza a tomar forma de cara a las legislativas de este año.
