«Se trata claramente de un paro de contenido partidario en función del proceso electoral actual y del posicionamiento frente a las próximas autoridades nacionales; una protesta que al intentar hallar sus razones uno descubre que va contra las paritarias», puntualizó el ministro.

Tras participar en la 104 Conferencia de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Tomada señaló que la cartera que conduce «siempre trabajó hasta el último minuto en la alternativa de evitar una medida de acción directa».

Para el ministro, una huelga siempre perjudica a la economía y a los ciudadanos, aunque adelantó que para el caso de que se concrete significará básicamente «un paro del sector del transporte que afectará el funcionamiento y el desplazamiento en general, lo que de seguro motivará distintas evaluaciones, pero es partidario».

«Al buscar las razones de la huelga de los gremios del transporte (a los que se sumaron las CGT Azopardo y Azul y Blanca y la CTA de Pablo Micheli), uno descubre que va contra las paritarias, porque ninguno de esos sindicatos comenzó a negociar, por lo que no se sabe por qué paran si no hablaron todavía con sus empleadores. Hay algo muy curioso en algunos sectores» del movimiento obrero, dijo.

Tomada sostuvo que para esos sectores pareciera que «las paritarias son con o contra el Gobierno, cuando sería muy bueno que asumieran que son con o contra los empresarios. El diálogo es entre el capital y el trabajo, entre empleadores y sindicatos. El Estado solo tiene un rol de mediador y de acercamiento de partes».

El funcionario laboral explicó que en algunas ocasiones el Estado tiene mayor presencia para introducir «los elementos del contexto económico y social en el que se desenvuelven las paritarias, pero la discusión y el número final surge del consenso común», señaló.

Tomada puso como ejemplo que algunos consideran que «en la negociación de los gremios de comercio o metalúrgico los empresarios estaban dispuestos a abonar más», y fue categórico al afirmar que «el número alcanzado fue el del consenso, aunque no hayan quedado todos muy satisfechos, porque seguro los trabajadores querían un poco más y, los empleadores, pagar un poco menos».

«Si el paro del 9 es por las paritarias, sería bueno que esos gremios que adhirieron averiguasen primero en qué estado está su negociación y qué propondrán los empresarios, porque este sector ofrecerá lo que ofrecerá y, los gremios, tendrán que justificar por qué reclaman lo que reclaman. Esa es la negociación colectiva. No se trata de torcerle el brazo al Gobierno», puntualizó Tomada.

El ministro ratificó ese concepto al señalar que «no se puede parar para intentar afectar el desenvolvimiento de la economía o ubicarse en una determinada posición política, por lo que observaremos cómo se desarrolla este paro preventivo», concluyó.

En otro orden y, al ser consultado sobre las conversaciones que mantienen varios sectores sindicales respecto de la posible reunificación de las centrales obreras, el ministro señaló su beneplático de que «los dirigentes dialoguen» en ese sentido.

«Quienes provenimos del espacio sindical siempre fuimos firmes partidarios de la unidad y seguimos sosteniendo esa posición, porque la vocación unitaria del movimiento obrero fue demostrada muchas veces, más en declaraciones que en realidades», afirmó.

Tomada señaló que «aspira» a que el sindicalismo concrete ese objetivo y expresó que finalmente «se logrará», aunque dijo «desconocer» en qué plazos, porque «eso dependerá de negociaciones y charlas de los dirigentes. Pero los trabajadores están unidos».

Impuesto a las ganancias 

También, Tomada, aseguró  que no está en la agenda del gobierno una modificación del Impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría ante la inminencia del cobro de los aguinaldos y la recomposición de los salarios en varias actividades.

«La verdad no sé. Ustedes recuerdan que se han tomado decisiones sobre el aguinaldo en otros oportunidades», sostuvo en principio el ministro en una entrevista en la sede de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en Ginebra, al ser consultado sobre la posibilidad de exceptuar del Impuesto a las Ganancias a la primer cuota del Sueldo Anual Complementario.

No obstante, Tomada fue enfático ante una eventual reforma de escalas o modificación del mínimo no imponible y reseñó que «este año se acaba de tomar una medida que tiene ciertamente impacto para los sectores que tienen menos ingresos dentro de ese 10 por ciento que paga el Impuesto a las Ganancias», indicó en relación a los recientes cambios sobre las deducciones de las asignaciones familiares en el marco del gravamen.

«No veo que esté en el horizonte inmediato nuevas reformas, en particular con respecto al tema del aguinaldo, no tengo nada que decir», aseguró.

Sin embargo, reconoció la posibilidad de «encarar reformas tributarias más amplias» a nivel legislativo, aunque descartó que «sea en esta etapa de gobierno».