El detenido ex secretario Legal y Técnico de los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner, Carlos Zannini, apeló hoy su procesamiento con prisión preventiva en la causa por encubrimiento del atentado a la Amia y cuestionó por «nulo» y «arbitrario» el fallo del juez federal Claudio Bonadio.

Además, el también detenido con prisión domiciliaria ex canciller Héctor Timerman pidió la excarcelación mientras que otro preso en la causa, Luis D’Elía, apeló a la Cámara Federal el rechazo a liberarlo firmado por Bonadio el jueves último.

Estas fueron las primeras presentaciones de las defensas de los seis procesados con prisión preventiva el jueves último por supuesta «traición a la Patria» y «encubrimiento agravado» de iraníes prófugos por el atentado a la Amia, con el reinicio de la actividad judicial tras el fin de semana largo.

Las defensas tendrán plazo para apelar el fallo de Bonadio hasta el próximo miércoles o bien en las dos primeras horas del jueves, en base a la fecha en que hayan recibido las notificaciones del mismo.

En ese marco, los abogados de Cristina Kirchner, procesada y con un pedido de desafuero al Senado nacional, anticiparon que recurrirán el miércoles la prisión preventiva que se ordenó en su contra.

Si bien dependerá de la premura con que Bonadio conceda los recursos, las apelaciones de D’Elía y Zannini deberían ser las primeras en llegar a la sala II de la Cámara Federal, integrada por los camaristas Eduardo Farah y Martín Irurzun.

Según explicaron a Télam fuentes de ese tribunal de Apelaciones, la intención es fijar fecha de audiencia a la brevedad, para escuchar de manera oral o escrita los argumentos de los letrados, antes de decidir, al menos en los planteos considerados más urgentes y vinculados a las detenciones ordenadas.

Los abogados de Timerman, Alejandro Rúa y Graciana Peñafort, requirieron a Bonadio a primera hora de la mañana que conceda la excarcelación por razones de salud y porque no corresponde el dictado de la prisión preventiva.

«La prisión -aún domiciliaria- que se le ha dictado no puede mantenerse, puesto amén de no contener una motivación suficiente, tampoco resulta necesaria ni absolutamente indispensable ni estrictamente proporcional», consideró la defensa de Timerman.

El ex canciller está bajo tratamiento por una grave enfermedad y debe salir de su domicilio de manera habitual para tratarse, con eventuales viajes a Nueva York, sostuvieron sus abogados.

Sobre este pedido deberá pronunciarse el fiscal del caso, Eduardo Taiano, y, luego, resolverá Bonadio.

En cuanto a Zannini, su abogado Mariano Fragueiro Frías apeló directamente el procesamiento con prisión preventiva y requirió que Bonadio le conceda «urgente» el recurso y lo envíe a la Cámara.

En su presentación, el letrado afirmó que Bonadio construyó «una resolución profundamente arbitraria» y renunció a «respetar las garantías constitucionales».

El juez «agravia y perjudica gravemente no sólo a los imputados sino también a la Patria», advirtió al pedir la nulidad del procesamiento y de la detención de Zannini dictada con una «fundamentación aparente».

El procesamiento se basa en «falsedades, consideraciones inexactas» y además está «signado por las más variadas contradicciones», indicó Fragueiro Frías en la presentación que realizó esta mañana.

«Es imposible administrar Justicia de cualquier manera», agregó sobre la situación de Zannini, a quien el juez -indicó- llamó a indagatoria «artificiosamente», sin un pedido previo de la fiscalía ni de ninguna de las partes del caso.

El abogado aludió a una «orfandad probatoria» en lo referido a Zannini, preso desde el jueves último, al igual que D’Elía, Timerman, Fernando Esteche y Jorge Khalil.

Por su parte, D’Elía apeló el rechazo a concederle la excarcelación firmado el jueves por Bonadio.

Para ello, su abogado Adrián Albor, argumentó que formalmente Bonadio ya está jubilado desde el 30 de noviembre pasado, por lo cual no podría haber firmado el fallo y además dijo estar ante una «verdadera privación ilegal de la libertad».

“El gravamen resulta obvio en autos, en el que un `no juez` decide el encierro de una persona, engaña a las fuerzas de seguridad y a las autoridades penitenciarias, confeccionando instrumentos públicos ideológicamente falsos en los que hace insertar falsamente que es el juez de la causa”, sostuvo el abogado, quien advirtió estar «ante una verdadera privación ilegal de la libertad».