Este miércoles, en horas de la madrugada,  diez internos que se encontraban alojados en la Comisaría 5ª, ubicada en Italia al 2100,  se dieron a la fuga. Un despliegue policial de proporciones mantuvo en vilo a toda la zona.

Las primeras informaciones dieron cuenta de que los reclusos consiguieron limar los barrotes que dan al patio, romper un alambrado y luego evadirse de la seccional por un estacionamiento que tiene salida por Riobamba. Según pudo saberse, la comisaría se encontraba superpoblada. Cuarenta internos convivían en un espacio con capacidad para veinte personas.

Según los trascendidos, la fuga se habría producido entre las 4.30 y las 5 de la mañana, pero fue detectada por el personal de la comisaría alrededor de las 7.30.

Fuentes de la investigación aseguraron a Conclusión que «los barrotes limados, si bien son de una pulgada, son de ‘hierro dulce’, es decir, un hierro blando que se corta fácilmente». Además, informaron que dentro del penal, encontraron un «montón de sierras».

«No es un problema del personal de la comisaría, es un problema del Ministerio de Seguridad, afirmó una vecina que hace 30 años vive en la zona. Pullaro vino hasta aquí en diciembre,  hizo todo el circo de llevarse a los presos y decir que la policía tenía que cuidar a los vecinos, y a la semana siguiente volvimos a la misma situación». «Esa situación, explicó, es que hay más de 40 presos alojados en un barrio que paga impuestos como si fuera residencial, pero aquí se escuchan gritos, hay cumbia a todo volumen hasta las 4 de la mañana que sale del penal. No puede haber esta cantidad de presos alojados en este lugar, en medio de un barrio que se pretende tranquilo».

Otra vecina que dialogó con la prensa pero no quiso dejar su nombre, relató que es normal que haya disturbios, gritos y música hasta altas horas de la madrugada. Lo que ocurrió hoy es algo totalmente previsible, porque con cuarenta personas alojadas allí, es lógico que ocurra». Y agregó: «Lo lamentable es que la policía no puede patrullar el barrio porque tiene que cuidar a los presos, función que no les corresponde. El ministro Pullaro nos mintió  porque en diciembre dijo que iban a retirar a todos los presos de la comisaría porque no correspondía que estuvieran alli y que la función de la policía era patrullar y cuidar a los vecinos. Eso duró una semana, a la semana siguiente, volvieron a traer a los mismos presos que estaban y los dejaron nuevamente aquí».

La mujer también señaló que cuando van a la comisaría para quejarse del tema, les responden que «no pueden hacer nada y deben presentar las denuncias en la fiscalía». «Es una vergüenza», remató.

En la investigación se encuentra trabajando la fiscal de Violencia Institucional, Karina Bartocci, la división Asuntos Internos y la Policía de Investigaciones.

Interviene la fiscal de Violencia y Corrupción Institucional del Ministerio Público de la Acusación (MPA) Karina Bartocci, Asuntos Internos y la Policía de Investigaciones (PDI). Se espera que en las próximas horas se les tome declaración al personal policial y al resto de los reclusos.