La cumbre de ministros de Finanzas del G20, que reúne a las economías más desarrolladas del planeta, cerró hoy sin alcanzar un consenso sobre el futuro de las relaciones de libre comercio, uno de los puntos clave sobre el que se desarrolló desde el jueves el encuentro en la ciudad alemana de Baden Baden.
«Hubo un amplio consenso entre los líderes financieros del G-20 en que la apertura comercial es clave para fortalecer la solidez económica», dijo el ministro de Finanzas alemán Wolfgang Schaeuble, en declaraciones citadas por las agencia EFE y DPA, minimizando la falta de un rechazo claro al proteccionismo por parte del foro en el documento final.
De acuerdo al comunicado oficial de la cumbre del G-20 difundido esta tarde, no hubo un acuerdo de consenso que apoyara el libre comercio, en lo que se anticipaba sería un retroceso respecto a los compromisos previos de estas mismas naciones en rechazar el proteccionismo.
En su reunión del año pasado en China, los líderes financieros del G-20 se habían comprometido sin fisuras a resistir todas las formas de proteccionismo, lo que no pudo ser reafirmado hoy.
«Todos estamos convencidos de que el comercio global conduce al crecimiento global», señaló Schaeuble en una rueda de prensa al cierre de la reunión de dos días de jefes de bancos centrales y ministros de Finanzas de las 20 economías principales.
Al ser consultado sobre por qué en el texto final no hubo un rechazo abierto al proteccionismo, Schaeuble dijo que «no es que no estuviéramos unidos. Es totalmente indiscutible que estamos contra el proteccionismo. Pero no está muy claro qué implica (el proteccionismo) para cada uno (de los ministros)».
El funcionario agregó que en algunos países la responsabilidad de negociar las políticas comerciales no la tienen los ministerios de Finanzas, por lo que ciertas delegaciones no tenían la facultad de apoyar compromisos amplios en materia de comercio.
No obstante, el funcionario alemán puntualizó que en la reunión «hubo consenso en que la recuperación de la economía mundial avanza, pero el crecimiento global es menor que el que se desearía».
Respecto a quienes creen que el comunicado del encuentro es una decepción por ser demasiado vago en muchos temas, Schäuble opinó que «a veces hay que considerar que en estos encuentros no se le puede pedir demasiado a algún socio».
Al respecto, el secretario del Tesoro estadounidense, Steven Mnuchin, dijo que «lo que estaba en anteriores comunicados del G20 no es necesariamente importante ahora» y pidió que no se lea demasiado en el lenguaje del comunicado, aunque posteriormente reconoció que el texto debe reflejar las discusiones mantenidas.
Mnuchin también señaló, en una rueda de prensa posterior a la reunión de ministros, que es necesario corregir los desequilibrios globales en el comercio en los casos que se produzcan, en una referencia al superávit comercial de Alemania.
Pese a que sus dichos ratificaban que el principal escollo para un acuerdo más amplio y preciso respondió a la nueva postura de Estados Unidos, Mnuchin calificó la reunión de «increíblemente productiva» y afirmó que su país «cree en el comercio; en el comercio libre, justo y equilibrado».
«Queremos una situación de ganar a ganar, en la que lo que es bueno para nosotros es bueno para otros», añadió el secretario del Tesoro estadounidense.
Los problemas actuales, desde las discusiones sobre la política comercial del nuevo gobierno de los Estados Unidos, hasta las tensiones que genera en las relaciones internacionales la situación en países como Turquía o Rusia, se anticipaba que interferirian en la agenda de tres días que se desarrolló en Baden Baden desde el jueves.
Así, los grandes temas como el desarrollo de una nueva arquitectura financiera internacional o la cooperación en materia fiscal para cerrar vacíos legales que son aprovechados por grandes consorcios, se enfrentaron en esta ocasión a las turbulencias políticas que hacieron difícil la búsqueda de fórmulas comunes.
De la cumbre participó el ministro de Finanzas, Nicolás Dujovne, quien ayer había advertido en el mismo foro sobre las consecuencia de las políticas proteccionistas que impiden el crecimiento de las naciones en desarrollo, y planteó los problemas que generan tanto el populismo como la expansión de la economía que no tiene en cuenta las necesidades de la gente.
Esta mañana, Dujovne mantuvo un encuentro bilateral con su par de Finanzas de la República Popular China, Xiao Jie, con quien resaltó la nueva senda que está atravesando la Argentina en materia de crecimiento, en el marco de la profundización de los vinculos comerciales y de inversión que retomó el presidente Mauricio Macri.
Xiao Jie manifestó el pleno apoyo de su país hacia la Argentina en la organización de la presidencia del G20 en 2018.
Junto a Alemania, la Argentina y China forman parte de la troika del G20, un grupo de trabajo formado cada año por el país que ejerce la presidencia del G20, junto a su antecesor y su sucesor inmediatos.
Más tarde, Dujovne tuvo un encuentro bilateral con el Secretario de Hacienda y Crédito Público de México, José Antonio Meade Kuribreña, en el que coincidieron en la importancia de avanzar en un acuerdo comercial entre México y el Mercosur, profundizar el vínculo entre la Argentina y la Alianza del Pacífico y estrechar las relaciones comerciales entre ambos países.
