Un ex juez penal culpable de abusar menores carenciadas en Río Negro cumplirá su condena en una antigua y abandonada casona del paraje rural de Cubanea, en Río Negro, cuyos vecinos aseguran que está «embrujada».

Juan Bernardi debe cumplir una condena a cinco años de prisión luego de haberlo encontrado culpable de corrupción de menores. Participó de fiestas sexuales con menores carenciadas, que
estaban alojadas en institutos dependientes del gobierno de Río Negro.

Como se trata de un ex magistrado que dictó la prisión de varias personas no puede ser alojado en una cárcel por miedo a represalias, entonces deberá cumplir la condena a cinco años de prisión en una antigua y abandonada casona del paraje rural de Cubanea, en la provincia de Río Negro.

Según medios de prensa y la agencia Noticias Argentinas, los vecinos aseguran que se trata de una vivienda «fantasmal» y que en más de una oportunidad escucharon «ruidos extraños» que salían de su interior.

La construcción, de la década del 30, contará con la exclusiva compañía de un guardia penitenciario. El paraje fue fundado a mediados del siglo 19 por un grupo de 10 familias de origen italiano con el propósito de fomentar una colonia agrícola.

En la versión de los vecinos y policías que trabajan en el área, los ruidos provienen del segundo piso, lugar que fue adaptado para que el ex magistrado atraviese su condena.

En principio, se pensó en trasladar a Bernardi a la pequeña localidad de General Conesa, pero la intendenta Alejandra Mas y los concejales se negaron a recibirlo debido al grave delito por el que se lo condenó.

El ex juez tendrá escasas comodidades tales como un baño, una cama y un calefactor, para bañarse deberá utilizar agua de un pozo cercano.

«Confiamos en que su estadía allí sea breve ya que esperamos que prospere el recurso de casación contra la prisión preventiva, ya que mi cliente siempre estuvo a derecho y nunca manifestó intenciones de fugarse», indicó su abogado Manuel Maza.