En el marco del acto donde se dieron a conocer los resultados de la licitación para las obras de reforma del Aeropuerto Internacional de Rosario «Islas Malvinas», el gobernador de la provincia de Santa Fe, Miguel Lifschitz, volvió a hablar de una situación que es moneda corriente en estos días: la mega deuda que Nación mantiene en materia de coparticipación.

Respecto al ofrecimiento que realizó el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, días atrás de saldar parte de la deuda que tiene la Nación con la provincia con obras, el gobernador expresó que puede «ser parte de una solución pero no la totalidad».

«Lo que estamos esperando es una respuesta concreta para poder analizarla y no nos cerramos a ninguna alternativa. Si bien no hay un plazo, un fallo de la Corte debiera ser cumplido rápidamente. Nos pidieron paciencia y la tuvimos pero ya estamos transitando el segundo año de gestión del gobierno nacional y nos parece que ya es prudente tener una respuesta concreta», enfatizó.

Fondos para aeropuertos

Lifschitz sostuvo que considera «injusto» que la Nación destine fondos del Estado a aeropuertos concesionados y no lo haga con los públicos como es el caso de la terminal local y la de Sauce Viejo.

«Los recursos para la reforma del Aeropuerto Islas Malvinas son de la provincia en conjunto con recursos genuinos que genera el propio aeropuerto. Sin embargo buscamos mecanismos de financiamiento nacional para que la puesta en valor sea rápido, por lo cual trataremos que se encuadre dentro de la estrategia nacional que ya invierte en otros aeropuertos», dijo el gobernador.

Y agregó: «Lo hemos discutido con el ministro de Transporte (Guillermo Dietrich) y se lo he planteado al presidente porque no es justo, no es equitativo que se invierta recursos del Estado en aeropuertos concesionados de todo el país y no se tenga el mismo criterio con un aeropuerto público como el de Rosario».

Sin embargo, Lifschitz anticipó que no pierden «la expectativa de acordar un financiamiento compartido de esta obra».

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