Con el famoso Museo del Louvre de fondo, miles de simpatizantes del joven candidato liberal Emmanuel Macron se concentraron en la explanada que precede al jardín de las Tullerías para celebrar su victoria en el balotaje presidencial de Francia sobre la líder de la extrema derecha, Marine Le Pen.
Los primeros comenzaron a llegar a la tarde, y al caer la noche, cuando se conocieron los primeros sondeos de boca de urna, el lugar se llenó. Con banderitas de Francia y mucha alegría una multitud ordenada, muy controlada dentro del espacio organizada por la campaña de Macron inició un festejó que promete durar varias horas, mientras esperan el escrutinio definitivo.
Fiel a su discurso, Macron no organizó un festejo partidario tradicional, dominado por discursos políticos y agradecimientos formales. El candidato eligió dar su discurso de celebración en un lugar cerrado, sin aplausos ni un público en vivo.
En el escenario que montó en la explanada del Museo del Louvre, en cambio, se subieron DJs y bandas de música, que hicieron saltar a la multitud que festejaba la victoria en las urnas.
