Todo aumenta y el mercado inmobiliario es el primero en ajustarse a esos incrementos. Desde la Cámara de Empresas Inmobiliarias proyectan para el 2017 que los aumentos de los alquileres para el año que viene rondan el 25 por ciento.

José Ellena, presidente de dicha Cámara, dialogó con Conclusión y afirmó que el porcentaje previsto para el año que viene ronda el 25 por ciento y el mismo se aplicaría en las renovaciones, siempre y cuando el costo del alquiler esté actualizado. Es decir, que el alquiler esté dentro de los valores del mercado.

De esta manera y como modo de ejemplo, un contrato de alquiler por un valor actual de 4.000 pesos, pasaría a 5.000 aplicando el incremento.

Comparado con el año pasado, Ellena señaló que los ajustes se efectuaron sobre la proyección de un 30 por ciento, teniendo siempre en cuenta las negociaciones con respecto a las paritarias y los ajustes salariales.

Por otro lado, el titular del Observatorio Inmobiliario de Rosario, Carlos Roviti coincidió en el porcentaje de aumento pero admitió que todavía “hay una gran incertidumbre sobre cómo se va a mover la economía el año que viene”.

“El gobierno plantea que va a bajar a un 17 o 18 por ciento los índices inflacionarios, si eso ocurriera, ya para el año 2018 bajaría a ese valor. Pero históricamente nos hemos manejad dentro del límite de las paritarias”.

Alquileres bajos, sueldos también…

El 70 por ciento de los contratos de alquiler en Rosario son de asalariados, por lo cual, el mercado inmobiliario local fija los precios en base a las paritarias. Lo mismo ocurre a nivel nacional.

En este sentido, el director del Observatorio Inmobiliario afirmó que “el problema hoy no es que los alquileres están altos, sino que los sueldos están bajos”.

“Es el guarismo más bajo en estos 30 años de democracia, estamos en el 0,3 por ciento del valor del inmueble. Si bajamos el precio de los alquileres, deja de ser atractivo para la inversión y se dejarían de comprar unidades para la renta y mientras la gente no pueda acceder a un buen crédito hipotecario, va a seguir alquilando. Y cuantos menos inmuebles hay en el mercado, más va a subir su valor”, explicó Roviti.

Un argentino promedio con un sueldo normal destina el 50 por ciento del mismo a los gastos relacionados con la vivienda, según contó el director, “en otros años quizás estabas entre un 30 u 35 por ciento, pero en los últimos cinco años se ha perdido notablemente el poder adquisitivo”.