El Gobierno sigue dando señales claras de que busca alinear lo más rápido posible el precio local del petróleo con el internacional, que ayer, ante la expectativa no demasiado fundada sobre el límite en la producción de la OPEP, cerró levemente por encima de u$s48 en Nueva York y en Londres.

La medida conduciría a una brusca caída de actividad en todas las cuencas, que en el caso especial de la del Golfo (Chubut y Santa Cruz) podría llegar al 30%. Trascendió además que este mismo mes podría haber una nueva rebaja en el precio local que todavía se ubica cerca de u$s63 para el crudo de más calidad de la cuenca neuquina. Y que la decisión política es acelerar los plazos para concluir el proceso durante el primer trimestre del año próximo.

La iniciativa genera resistencia entre los gobernadores de las provincias productoras tanto por la pérdida de puestos de trabajo como por la disminución de la recaudación por regalías que se anticipa. El gobernador de Chubut, Mario Das Neves, advirtió ayer: «No vamos a acompañar de ninguna manera al Gobierno nacional si pretende liberar el valor del petróleo», y aseguró que su provincia «va a defender el precio sostén a como dé lugar porque de eso dependen miles de puestos de trabajo y para eso estamos manteniendo conversaciones los gobernadores de provincias productoras».