Por primera vez desde que se inició la ola despidos, la pérdida de puestos de trabajo muestra una desaceleración. El número de personas que quedaron sin empleo en septiembre fue sensiblemente menor al de los meses anteriores, según indicó un relevamiento del Centro de Economía Política Argentina (Cepa).

No sucedió lo mismo con las suspensiones, que continúan siendo muy elevadas y están concentradas en las fábricas, como reflejo de la gravedad de las dificultades que atraviesa la producción industrial. El 85 por ciento de las suspensiones corresponden a sólo cuatro actividades, todas afectadas por la baja en el consumo interno: textiles, alimentos y bebidas, petróleo y automotriz.

El centro de estudios registró que durante septiembre se produjeron 1554 despidos; en agosto habían sido más de 10 mil.

Si bien la variación en el índice intermensual de pérdida de puestos de trabajo es una noticia para el alivio, el acumulado anual sigue mostrando una situación de gravedad. Al 30 de septiembre de 2016 se suman 213.166 despidos y suspensiones. “No hubo un proceso de ajuste de los planteles de este tenor desde la salida de la crisis de 2001”, señala el centro que dirige Hernán Letcher.

El número de suspensiones de septiembre fue de 3532, una cantidad que sigue alta y esboza el peligro de que el ciclo de cesantías se reanude.

 

Fuente: Página 12