Una campaña para detener la deportación de un adolescente afgano que huyó al Reino Unido cuando era un niño después de que su padre fuera asesinado, tomó un nuevo impulso tras el compromiso del gobierno británico de revisar su decisión justo horas antes del vuelo que lo enviaba a Afganistán.

Los políticos de los cuatro partidos en la Asamblea de Gales, incluyendo el nacionalista UKIP, junto a celebridades como las cantantes galesas Charlotte Church y Cerys Matthews, también expresaron su apoyo.

Naderi fue detenido el mes pasado por funcionarios de inmigración en Cardiff e iba a ser trasladado ayer de regreso a su país devastado por la guerra, donde su padre fue muerto a tiros por los talibanes, a pesar de no hablar el idioma y después de haber pasado la mitad de su vida en el Reino Unido.

Sólo con la ropa que llevaba puesta, al parecer fue esposado y conducido hacia el aeropuerto londinense de Gatwick con un pasaje de vuelta a Afganistán.

Una orden judicial presentada por su novia y su familia adoptiva impidió horas antes que el adolescente fuera forzado a subir al vuelo con destino a Kabul.

Después de que su padre murió, la madre vendió las tierras de la familia para enviar a su hijo al Reino Unido, y luego del año que le tomó llegar a Gran Bretaña, fue entregado a una «familia de acogida» en la capital de Gales.

El Ministerio del Interior británico, por su parte, informó que tendrá en cuenta el caso de Naderi, y se comprometió a revisar la decisión de enviarlo de nuevo a Afganistán.

Al momento de su detención, el adolescente estaba preparando sus exámenes para ingresar a la Universidad. Naderi asistió a una escuela secundaria católica en la que era considerado un “joven excepcional”.

«Estamos sorprendidos que el petitorio por Bash, que juntó 13.000 seguidores. No teníamos ni idea de que esto podía pasar y estamos muy agradecidos por las palabras de apoyo en Facebook y Twitter y de la gente, los parlamentarios y las celebridades”, dijo la novia de Naderi, Nicole Cooper, a los medios británicos.

Su madre adoptiva, Dawn Jackson, de 56 años, lo describió como un ser «respetable y un alma gentil. Es un ciudadano decente y merece quedarse aquí».

«Ha estado aquí la mitad de su vida. Quiero verlo graduarse en la Universidad», afirmó su madre quien dijo además que lo tomaría como un fracaso si vuelve, «no quiero pensar en eso», expresó.

Un portavoz de la campaña celebró la noticia y agregó que si bien es un avance importante después de semanas de incertidumbre y ansiedad, Bash y su familia son conscientes de que es un punto de partida, pero no un resultado.

Sin embargo, aseguró que proporciona la oportunidad de presentar «la evidencia abrumadora en apoyo a Bash».

Según un informe de la Red de Apoyo a Refugiados, más de 2.000 jóvenes fueron desplazados por la fuerza a Afganistán desde el Reino Unido desde 2007.