La actualidad económica de la Argentina es seguida con atención por distintas especialistas de Wall Street, quienes, consultados por Clarín, no dudan en advertir que “es compleja” y que existe desconfianza dados los cambios en las metas de inflación.

“Desde afuera los inversionistas están muy atentos a la realidad macro en Argentina, dado el grado de exposición en deuda local de corto plazo, y la preocupación aumentó claramente en los últimos meses”, indicó Alberto Ramos, economista jefe para América latina de Goldman Sachs. A su vez, indicó que la macroeconomía

Ramos calificó a la situación macroeconómica como “bastante compleja” y elogió la suba de tasas que dictaminó el Banco Central:  “La decisión de intentar anclar el cambio y de subir la tasa rectora en 300 puntos básicos (a 30,25%) me pareció muy acertada dada la dinámica que adquirió el mercado cambiario. La depreciación continua del cambio se tornó un factor de riesgo para la inflación (por el traspase del cambio a los precios domésticos) pero también porque un cambio sin ancla puede comprometer un bien público que es la estabilidad macro y financiera”.

“Dada la presión sobre la inflación y el cambio, el acceso al financiamiento externo se vuelve más restrictivo (más caro) y selectivo. Las primas de riesgo subieron (por el riesgo cambiario y otros factores domésticos y externos) y como tal el inversionista extranjero requiere por ahora una tasa de interés más alta para continuar invertido en deuda local. Caso contrario surge el riesgo de flujos de salida de capitales, lo que podría generar un problema más serio en la cuenta de capitales y la balanza de pagos”, expresó el economista sobre el acceso al crédito externo.

Por otro lado, Joaquín Cottani, economista jefe para América latina de Standard & Poor’s, sostuvo: “La visión del mercado externo parecería haber empeorado sólo un poco desde diciembre, a juzgar por el aumento de 100 puntos básicos de la prima de riesgo en dólares. Eso hace suponer que el Gobierno sigue teniendo acceso al crédito externo, solo que un poco más caro. Lo que más preocupa al mercado, y que se manifiesta en la presión sobre el tipo de cambio, es el riesgo de una suba explosiva de la deuda del Banco Central, que el aumento de la tasa de interés no resuelve”.

Mientras que Alberto Bernal, estratega en jefe de mercados emergentes de XP Securities, afirmó que “a Wall Street no le gustó la forma como se cambiaron las metas de inflación en diciembre pasado: tomaron el mensaje como una intromisión del Ejecutivo en la política monetaria. Esa decisión generó una importante depreciación del tipo de cambio y un incremento de las expectativas inflacionarias. Atado a esto, el mercado financiero internacional ha sido testigo de un incremento de más de 60 puntos básicos en la tasa del bono de 10 años de EE.UU., y ese hecho ha generado una disminución de los precios de los activos argentinos”.