Las inundaciones que afectan a la provincia de Santa Fe reavivaron en las últimas horas las internas dentro de la gestión santafesina, conducida por el gobernador socialista Miguel Lifschitz, quién desplazó de su cargo al secretario de Recursos Hídricos, Roberto Porta, de procedencia radical.

«Pasó un año desde que asumí y no estoy conforme con el trabajo realizado por el ingeniero Porta. Por eso decidí hacer un cambio en el área», aseguró Lifschitz.

“Es el momento dónde uno tiene que hacer los cambios necesarios para mejorar, y necesito gente muy activa trabajando en el área”, agregó el máximo mandatario provincial, al tiempo que expresó que la decisión “no tiene nada que ver con la política, tiene que ver con el desempeño. Tengo 6 ministros del radicalismo en el gabinete y estoy muy conformes con ellos”.

Consultado sobre las consecuencias que dejó el temporal en muchas localidades de la región, detalló que “hay alrededor de mil viviendas afectadas”, y que los mayores daños se produjeron en “Arroyo Seco, Pueblo Esther, y Villa Constitución”.

Asimismo, remarcó que existen “más de un millón de hectáreas productivas muy afectadas, por lo que estimamos un impacto económico de 15 mil millones de pesos”.

En este sentido, Lifschitz expresó que necesitarán un apoyo “extraordinario” del Gobierno nacional. “Hablé por teléfono con el presidente y hay buena predisposición. Este jueves tendremos una nueva reunión en Buenos Aires, y esperemos contar con su respaldo porque la economía de Santa Fe es una de las más importantes”, adelantó el funcionario.

“En nuestras zonas agropecuarias hubo un cambio en el uso del suelo, con el monocultivo. Es algo que tenemos que entender todos, incluso los productores”, concluyó.