La economía argentina es un paciente que muestra signos vitales de mejoría, especialmente en el plano industrial. La incertidumbre financiera, contenida en forma precaria por instrumentos del Tesoro, ensombrece el futuro cercano y mediano, a las puertas de una negociación ya ineludible. El Gobierno trabaja con cables pelados.
La entidad monetaria, en un comunicado, sostuvo que "estas actuaciones se enmarcan en el objetivo del Banco Central de potenciar una recuperación equilibrada y sostenida en todo el país".
La causa en cuestión se extendió por más de tres décadas e inició a raíz de las denuncias efectuadas en agosto de 1990 por la Comisión Gremial Interna del Banco Provincial de Santa Fe.
Según lo dispuesto, las entidades financieras deberán recibir hasta el 28 de febrero de 2022 (inclusive) los ejemplares presentados por el público a los fines de su canje o acreditación en cuenta.
La medida se decidió para rechazar el cierre y fusión de sucursales de los bancos Santander y Supervielle, entre otras demandas. Denuncian que con ello "disminuye los puestos laborales y flexibiliza las condiciones de trabajo".
La ley aprobada en febrero establece, entre otros puntos, que el presidente del Banco Central tendrá un mandato de cuatro años que no coincide con el del presidente de la República.
Son fondos que no deben ser devueltos porque no constituyen un préstamo del organismo internacional. Tras la confirmación del arribo de los recursos, el BCRA comunicó que la entidad "cuenta con una posición robusta para enfrentar eventuales episodios de mayor volatilidad financiera".
Se tratan de Derechos Especiales de Giro, y representan más del 10% de las tenencias internacionales brutas, que podrían superar los u$s46.000 millones por primera vez en 22 meses. El grueso se usará para pagarle al propio organismo.
Si bien el país tiene una reserva de 9.000 millones de dólares, la misma fue depositada en el extranjero y, puntualmente, la mayor parte está en bonos de la Reserva Federal estadounidense. Mientras tanto, la cantidad de dólares físicos en su territorio es "cercana a cero", indicó el presidente de la entidad monetaria afgana.
A fines de julio pasado, analistas del mercado proyectaron que la inflación minorista para 2021 se ubicará en 48,2% interanual y quienes mejor pronosticaron esa variable para el corto plazo esperan en promedio una inflación de 48,5%.
Con un severo control por parte de Banco Central, se reportó que en junio subió tras nueve meses en caída el número de personas que adquirieron divisas. Un clásico cuando se acercan elecciones, que podría complicar aún más una “pax cambiaria” atada con alambres.
Se trata del primer pago parcial anunciado por el ministro de Economía, Martín Guzmán, quien logró un entendimiento mediante el que acordó extender los plazos hasta el 31 de marzo de 2022, al evitar caer en default.