Una parte de la industria textil comenzó a adaptar sus establecimientos y a formalizar protocolos de trabajo para producir insumos críticos en la lucha contra el coronavirus -como tapabocas, batas y cofias-, y así mejorar su situacion económica.
Freno a los tarifazos, recuperación del consumo, baja de las tasas de interés, fin de las importaciones sin control. En un nuevo escenario, la industria textil proyecta crecer hasta 20 por ciento este año.
Desde el 2016 a la actualidad la industria textil perdió más del 30% del nivel de actividad y el uso de la capacidad instalada se encuentra en niveles mínimos históricos
Según datos de la Asociación Obrera Textil, esta industria perdió casi 9.000 puestos de trabajo en todo el país en los últimos tres años como consecuencia del cierre de plantas de producción y de la reducción de personal.
La actividad industrial de las productoras de indumentarias lleva once meses consecutivos de caída y se encamina a cerrar el año en rojo, advirtieron desde la Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria (Ciai).
Representantes de la firma fueron convocados, además, una audiencia entre partes para el próximo 24 de abril, para buscar la formalización de un acuerdo. Según dijeron desde el gremio, deberá ser "con los trabajadores adentro".
Para el presidente de la Fundación ProTejer, Yeal Kim, "el futuro es muy negativo, vemos un túnel totalmente oscuro".
Según los cálculos realizados por la cámara que agrupa a este sector productivo, la fabricación y venta encuentra como “factor más negativo” la suba de la tasa de interés para contener la corrida cambiaria.
Inició un concurso de acreedores y pidió un procedimiento preventivo de crisis. Los empleados serán suspendidos y percibirán el 70 % del salario hasta diciembre.
Se vendió entre un 12 y un 15 por ciento menos que el año pasado. Las importaciones, un factor clave. Es otro de los sectores más afectados desde la asunción de Macri al Gobierno.
El índice que mide la evolución de la industria registró un saldo negativo en la comparación interanual, luego de un año de resultados positivos.
Se trata de la textil Tenimbó SA de Esquina, Corrientes. Ya adelantaron vacaciones a todo su personal y no sube la demanda. Está en riesgo la fuente laboral de más de cien familias por la crisis que afecta al sector.