Los profesionales de la salud nucleados en SiPrUS realizarán una medida de fuerza por 48 horas, el lunes y martes próximos. En tanto ATE se plegará sólo el lunes y la Asociación de Médicos de la República Argentina hará lo suyo este viernes 23 de febrero.
La medida de fuerza afecta a principalmente al sector asistencial de clínicas, sanatorios, hospitales particulares y geriátricos, entre otras instituciones.
Desde ATSA señalaron que la medida obedece a la negativa patronal de llegar a un acuerdo para la “recomposición digna de los salarios” y que además están incumpliendo lo acordado en el mes de enero al respecto de un bono no remunerativo.
A pocos días del inicio de clases, el Gobierno nacional no convocó a paritarias y recortó el salario de los maestros. Los gremios esperan hasta el jueves, pero ya adelantaron que habrá medidas de fuerza.
El cotitular de la CGT, Héctor Daer, dijo que “el Gobierno está generando todas las condiciones” para un nuevo paro general, mientras que su par, Pablo Moyano, pronosticó que “marzo va a ser un mes muy conflictivo por el aumento de los colegios, los servicios y la política de ajuste”.
El referente sindical aludió a que en la próxima reunión del Consejo Directivo de la CGT “se va a analizar como seguir” mientras sus pares locales adelantaron que la participación y el apoyo a una nueva medida de fuerza serán totales.
En el encuentro se acordó que habrá patrulleros en algunos barrios de la ciudad que, al ver a los camiones recolectores, se acercarán para custodiarlos mientras realizan su trabajo. No obstante, la propuesta no entusiasmó del todo al Sindicato de Recolectores, que ahora evalúa realizar un paro en toda la ciudad.
Sin haber obtenido respuestas gubernamentales a algunos de los tantos reclamos que vienen haciendo para que se actualicen los aranceles que se pagan por kilómetro, desde Atraes comenzaron una medida de protesta, con corte de servicios por tiempo indeterminado.
Los choferes advierten que, si no es depositado este miércoles de forma integral el sueldo anual complementario del segundo semestre del año, realizarán una medida de fuerza a partir del jueves a la medianoche.
El servicio, que estuvo suspendido durante más de dos días ante el asesinato del chofer César Roldán mientras trabajaba, se retomó durante la primera hora de este martes, mientras que por la mañana las frecuencias funcionaban con normalidad.
La medida se centra en reclamo de aumentos salariales, pases a planta, cambio de escalafón y continuidad laboral. La próxima semana el paro será de 48 horas si no obtienen respuestas.
“Lamentablemente las cosas no han cambiado por eso también hoy profundizamos la medida. No sólo es el vaciamiento sino ahora también la falta de presupuesto”, denunciaron a Conclusión.