La fábrica autopartista Concentric AB, una empresa de capitales suecos que lleva más de 50 años en el país anunció el pasado 8 de enero el cierre definitivo de su planta, ubicada en Chivilcoy, que emplea a unas 70 personas. A partir de ese momento, se desató el conflicto con los gremios metalúrgicos que mantienen tomada la planta con el fin de que se garantice el cobro de las indemnizaciones.

Al conocerse la sorpresiva noticia, tanto la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) como Asimra decidieron tomar la planta de la empresa hasta tanto haya una respuesta de la empresa. Si bien, la comunicación de la firma a los empleados fue que seguirán cobrando sus salarios hasta marzo y luego serán indemnizados, los representantes gremiales quieren asegurarse de que no haya ningún tipo de vaciamiento hasta que estén garantizados los pagos correspondientes.

La firma, que fabrica bombas de agua y aceite, piezas de inyección de aluminio y productos sinterizados y es manejada desde Gran Bretaña, envió un comunicado en el que informa que la razón del cierre es que «no es viable» seguir operando en el país. «(Concentric) ha evaluado cuidadosamente diferentes alternativas para la instalación en Argentina y ha concluido que lamentablemente no es viable continuar las operaciones debido a la situación macroeconómica sostenida y desafiante en el país».

El comunicado no abunda sobre algún motivo específico, más allá de la situación macroeconómica. Y agrega: «El costo único del cierre asciende a 22 millones de coronas suecas (aproximadamente 2,5 millones de dólares) y se reflejará en los estados financieros del cuarto trimestre de 2021».