El líder de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Antonio Caló, anunció esta mañana que el gremio suspenderá el paro de 36 horas lanzado para esta semana si el ministerio de Trabajo dicta la conciliación obligatoria.

El sindicalista se mostró «preocupado» por no poder arribar a un acuerdo de aumento salarial con las cámaras empresarias del sector, que ofrecieron un incremento del 22 por ciento mientras el gremio reclama un 31 por ciento.

La CGT oficialista que conduce Caló convocó a una reunión de urgencia a partir de los fracasos de las paritarias de la UOM y la dilación oficial para homologar el acuerdo del 30% del Sindicato de Empleados de Comercio con las empresas.

«Tengo buen diálogo (con los ministros) pero cuando es el momento de discutir las paritarias, ellos tienen una visión distinta a la nuestra. Yo le he dicho a los ministros que me expliquen cómo puede hacer una familia con dos hijos para vivir con 6.500 pesos por mes», sostuvo.

Dijo Caló que hay en la actividad metalúrgica trabajadores que recién se inician que están cobrando 5.100 pesos de bolsillo: «Esos compañeros me quieren matar, me van a colgar del Obelisco. Así que esta es la situación».

El líder metalúrgico y jefe de la CGT cercana a la Casa de Gobierno pidió a los empresarios que «entiendan» que los trabajadores no pueden vivir con 5.100 pesos mensuales, por lo que ratificó el reclamo del 31 por ciento.

Pidió ser «realistas» dado que en la actualidad los 6.700 pesos ya son destinados pura y exclusivamente a la canasta básica alimentaria para un matrimonio con dos hijos, por lo que consideró que el pedido de la UOM «no es descabellado».

«Estoy preocupado. Para un dirigente sindical lo más importante es la paritaria, y no lo puedo resolver. Los empresarios ofrecieron un aumento salarial del 22 por ciento y no se mueven de allí», se quejó Caló en declaraciones a radio Mitre.

El gremio pide un salario inicial de 8.500 pesos en bruto para cualquier trabajador que recién ingresa a una empresa metalúrgica, que se convierte en 6.700 pesos cuando se tiene en cuenta sólo el dinero «de bolsillo».

Caló indicó que ese pedido representa un aumento salarial del 31 por ciento para el salario inicial, al que señaló como «lógico» porque los sueldos en esta actividad «son bajos» dado que fueron arrasados en la década del  90 y aún fueron recompuestos de acuerdo a las necesidades de los trabajadores.

Precisó también que el Congreso Nacional de delegados de todo el país lo viene presionando desde hace más de 20 días para poner en marcha una huelga y él la venía dilatando para tratar de acordar con los empresarios, aunque se ve imposibilitado. Aclaró que si el ministerio de Trabajo, que conduce Carlos Tomada, dicta la conciliación obligatoria por diez días la UOM va a determinar la suspensión del paro, aunque la medida de fuerza será puesta nuevamente en marcha por 36 horas cuando venza la decisión oficial.

Al ser consultado sobre la demora del ministerio de Trabajo para homologar el acuerdo del 30 por ciento del Sindicato de Comercio que lidera Armando Cavalieri con las empresas del sector, Caló respaldó a su par sindical.

«No comparto si en el Gobierno o en cualquier otro lado quieren ponerle un techo a las paritarias. A mí siempre me dijeron que las paritarias son libres y las voy a defender», expresó Caló en declaraciones radiales.