La situación de los transportistas y profesionales que prestan servicios a personas con discapacidad «es dramática», señaló Pablo Bolego, presidente de la Asociación de Transportistas de Personas con Capacidades Especiales de Santa Fe (ATRES), y “si el gobierno sigue ignorando el reclamo del sector se podría llegar a un punto sin retorno”, agregó.

Sobre la negativa situación, desde Atraes detallaron que “en poco más de tres años, 43 transportistas en Rosario y región dejaron de prestar ese servicio por el ajuste que Cambiemos realizó en el rubro, con actualizaciones de los aranceles que no siguieron el ritmo de la inflación”.

En ese sentido, en diciembre de 2015 se contabilizaban en el Gran Rosario cerca de 400 licencias activas para trasladar a las personas con discapacidad, que concurrían a centros de día o instituciones de rehabilitación; hoy apenas llegan a las 350.

«El gobierno nacional no le va a dar de baja a las prestaciones, pero lo que hace es ahogar a los prestadores», dijo el Bolego, y añadió: «No hay manera de que se pueda sostener el servicio con lo poco que aumentaron los aranceles».

Concretamente, el dinero percibido por el servicio realizado por los transportistas que es regulado por nación “viene perdiendo mucho en relación a la inflación”, se quejó el transportista.

En este contexto, transportistas e instituciones realizarán una movilización el próximo 26 de septiembre en el Monumento a la Bandera. La actividad será nacional y se desarrollará en lugares claves en distintas provincias del país.

«Debido a la difícil situación se precariza mucho el servicio y llegamos a un límite donde no podemos ni reparar la unidad», disparó Bolego, y aclaró que el gobierno «no está garantizando los derechos de las personas con discapacidad». «Es una situación extrema», sentenció.