La firma Papelera Tucumán atraviesa una marcada crisis que paralizó su producción y generó una gran incertidumbre en sus trabajadores, a quienes les otorgaron vacaciones anticipadas, bajo el argumento de que se necesita reducir costos para superar una crisis económico-financiera.

El apoderado legal del Sindicato de Obreros Papeleros de Tucumán, Pablo Rivera, aseguró que “actualmente la fábrica ha frenado su producción porque hizo una presentación en la Secretaría de Trabajo provincial pidiendo cerrar la planta por 21 días y adelantar las vacaciones de los trabajadores de los años 2017 y 2018”.

Desde el sindicato se opusieron al pedido de paralización, según dijo Rivera. “Esto iba en contra del orden público laboral y, como ellos argumentan una situación de crisis, nosotros solicitamos que presenten los últimos tres balances para que puedan certificar ante la autoridad laboral el problema que existe”, continuó el letrado.

El Sindicato de Obreros Papeleros de Tucumán estima que si se produce el cierre de la fábrica se suspenderían a 150 trabajadores.

De esta forma, Papelera Tucumán se convierte en otra firma que adelanta vacaciones para intentar superar el momento de crisis y enciende las alarmas del gremio.