A partir de este mes de septiembre, las empleadas domésticas tendrán un aumento salarial del 8%, el que se aplicará, de forma retroactiva, desde los salarios de junio. Este aumento no es acumulativo y se extiende a todas las categorías laborales en este sector.

Así lo acordó la Comisión Nacional de Trabajo en Casas Particulares, que además estableció la implementación de un bono de $ 25.000, que se dividirá en dos cuotas a ser pagadas en septiembre y octubre. La distribución de este bono variará según el tipo de contrato laboral, ya sea a tiempo completo o a tiempo parcial.

Este 8% es parte del 36% cuyo pago se había establecido para los meses de julio (20%), agosto (8%) y septiembre (8%), cuotas que no son acumulativas.

La citada escala salarial impacta en más de cuatro millones de trabajadores en el país. Asimismo, los incrementos tienen efecto en los aportes y contribuciones que deben abonar los empleadores.

Paralelamente, se mantiene el 30% adicional por trabajar en zonas desfavorables. Las zonas que así son consideradas incluyen a La Pampa, Río Negro, Chubut, Neuquén, Santa Cruz, Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, o en el Partido de Patagones de la Provincia de Buenos Aires.

Adicionalmente, se debe contemplar los años de antigüedad de cada trabajador y agregar un 1% extra por cada año trabajado.

Para las empleadas domésticas que buscan opciones de financiamiento adicional, el Banco Provincia ofrece la posibilidad de solicitar créditos de hasta $150.000. Estos préstamos cuentan con una tasa de interés anual del 60% y un plan de devolución que permite hasta 36 cuotas. Esta iniciativa proporcionará un recurso adicional para satisfacer necesidades financieras personales.