Por Aldo Battisacco

Recientemente, Jorge Triaca, designado ministro de Trabajo por Mauricio Macri, prometió que se reuniría durante el transcurso de esta semana con empresarios y sindicalistas para sondear la posibilidad de implementar un acuerdo social. La más relevante de sus declaraciones, para el movimiento obrero fue aquella de que los salarios tenga como variable principal de análisis «la productividad de la economía».

Conclusión dialogó con referentes que pertenecen a distintos gremios, y se encontró con una constante, no imaginan de que forma se instrumentará este criterio al que sin ningún tapujo definieron como «extraviado y carente de todo asidero en la realidad».

peaje

Trabajadores de peaje

Por caso, la elección fue obligada. La inquietud se la trasladamos a Leandro Bond, secretario general de Sutracovi (trabajadores de peajes), quién expresó «que esta modalidad no tiene asidero en la realidad laboral de los trabajadores del sector, son 8 horas y de acuerdo la cabina que te toque tenés más o menos vehículos que pasan, ¿pero como haces para que pasen en forma proporcional?.

«La dinámica de nuestra actividad demandó que se plantee que se equiparen los sueldos de todas las concesiones viales, y la aplicación del artículo 14 bis de la Constitución», amplió Bond.

Para el representante de los trabajadores de peaje «el criterio que quiere aplicar el futuro ministro de Trabajo, no tiene aplicación, en este sentido ya se tuvo una experiencia nefasta -dijo el gremialista- porque se promovía que los trabajadores de cabina que llevaran a recaudación más cambio o bolsitas de 10 centavos cobraba un plus a fin de mes, y esto atenta contra el compañerismo» remató el sindicalista.

Por otro lado, el titular de la Bancaria de Rosario, Matias Layus, dijo «no estar de acuerdo con este concepto porque desde la organización se defiende la paritaria haciendo respetar la antiguedad y la participación en las ganancias de la entidad bancaria que sea. La postura es parte del neoliberalismo que fomenta la división y el individualismo en el ámbito laboral».

Matías Layús- Secretario General de la Asociación Bancaria de

Matias Layús

El representante de los trabajadores, especificó que los convenios colectivos del sector «no establece la recomposición salarial por productividad, los coeficientes por antiguedad, jerarquía y función rigen la negociación de los bancarios. La pregunta clave para La Bancaria, pasa por preguntarse, la productividad de quien? del patrón , del trabajador o de la empresa.

«Si así fuera -dice el sindicalista- cuando la empresa no tenga utilidades de acuerdo a sus expectativas, el salario del trabajador se verá menguado, y esto es retroceder a tiempos que ya conocimos y condenamos», concluyó Matías Layus.

El dirigente de los docentes estatales, Gustavo Téres, manifestó a Conclusión que la propuesta del ministro de Trabajo designado «flexibilizará las condiciones de trabajo en pos de una optimización de la ganancia, esto provocará un alto impacto en las cadenas de valor o productivas, en otros aspecto y vinculado con la labor docente, la productividad no se puede medir cuantitativamente».

El dirigente gremial sostuvo que en el ámbito docente «es inviable pensar en términos de productividad, la manifestación más perversa de todo esto en el sector es el presentismo, y ha sido cierta regulación meritocrática o cierto control tan exacerbado como pretenden los que tienen una visión neoliberal que rompe con el concepto de «a igual trabajo, igual remuneración», esto instala un falso mérito y competencia que llega al interior de las entidades educativas, planteando una salario diferenciado».

Gustavo Terés

Gustavo Téres

Según el representante de los maestros, la escuela «no es un lugar de competencia , sino de integración y de convivencia», y agregó que tratar de «instalar entre los trabajadores de la educación, que no tomarse licencia por salud, ir a actividades extra escolares y también depender de la evaluación de una directora que podría establecer que uno u otro docente trabajó mejor en un grado que en otro, o medir por la cantidad de cursos a los que se asistieron, es cuanto menos arbitrario y discrecional».

Por último, Gustavo Téres, precisó que se trata de «una tendencia a generar una reforma en la que con la misma plata un trabajador trabaje mucho más, esto generará que algunos trabajadores se lleven un poquito más de dinero y otros mucho menos», finalizó el gremialista.

Ayer el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, insistió: “Hay convenios que tienen cláusulas de ese tipo, pero hacerlo sólo por productividad condiciona mucho. Las paritarias deben seguir funcionando libremente”.