Trabajadores de Vicentin denunciaron que la propuesta del acuerdo preventivo –impulsada por la agroexportadora para pagar las deudas que mantiene con empresas que le vendieron granos u otros bienes y servicios– pone en riesgo a 80 puestos de trabajo administrativo en la planta que la cerealera tiene en la localidad de Avellaneda, ubicada al norte de la provincia de Santa Fe.

En diálogo con Conclusión, el secretario general del Sindicato de Obreros y Trabajadores Aceiteros y Desmontadores de Algodón de los departamentos General Obligado y San Justo, Leandro Monzón, indicó: “Nosotros venimos denunciando hace un tiempo largo, desde la mitad del concurso, que Vicentin decía que los puestos administrativos iban a quedar sin lugar en Avellaneda. No hablamos de la planta, sino lo administrativo”.

Y agregó: “Como nosotros no somos acreedores, no podemos impugnar, entonces decidimos mandar un escrito otra vez. El juez (Fabián Lorenzini) y la misma Corte Suprema de Justicia de Santa Fe indicaron que la empresa debe preservar los puestos de trabajo, pero todavía Vicentin no responde y eso es lo que nos da la incertidumbre de no saber qué va a pasar con la planta de Avellaneda”.

Consultado por los pasos a seguir, Monzón adelantó que están abiertos a realizar una huelga para que “el juez entienda que los trabajadores están afectados por la empresa” y considere este aspecto a la hora de homologar el acuerdo. Sin embargo, advirtió que actualmente el sindicato espera la respuesta del magistrado y de Vicentin.

“Lo que escribimos en el expediente lo hacemos protocolarmente en la empresa. Dimos todos los pasos que debíamos para que vean que queremos una Vicentin generadora y no una que sea de servicio”, detalló el gremialista aceitero.

Por último, indicó que en la planta de Avellaneda Vicentin genera entre 2.000 y 3.000 puestos de trabajo directos, mientras que el empleo indirecto en el norte santafesino es “cinco o seis veces” mayor.

¿Qué dice el documento presentado en la justicia?

En un documento dirigido al juez Fabián Lorenzini, y firmado por Monzón, se advierte que los trabajadores ven a la propuesta como “muy desfavorable”.

“La propuesta, de forma expresa, manifiesta la necesidad de despedir a 80 trabajadores. Además, propone a la planta de Avellaneda como activo prescindible, por lo que todos los trabajadores están en riesgo de perder su trabajo, con la consecuente afectación a las familias”, señaló Monzón en el documento.

 

Y agregó: “Dado que han manifestado su desinterés absoluto en esta región, estamos advirtiendo que Vicentin Avellaneda va a desaparecer y con ella los puestos de trabajos con la afectación que ello conlleva a las familias y a la zona”.

En el documento también se advierte que los trabajadores administrativos serían “despedidos en su totalidad”, mientras que los demás empleados estarán sometidos a una “situación de transición por dieciocho meses”, sin seguridad sobre sus puestos de trabajo.

“Esta propuesta perjudica en un 100% a los trabajadores, por lo menos a los de la planta de Avellaneda”, cerró Monzón.