Un plenario de comisiones del Senado comenzó hoy a debatir una Ley de Talles para unificar los criterios de confección de indumentaria, de acuerdo con las medidas antropomórficas de la Argentina.

Los legisladores iniciaron el estudio del tema mediante una audiencia de la que participaron funcionarios nacionales, representantes de fabricantes y de una organización no gubernamental.

La Cámara alta tiene en estudio al menos ocho proyectos de ley sobre una Ley de Talles de Indumentaria, y la idea es unificar en un solo expediente para que sea debatido antes de que termine el actual período parlamentario.

El Senado avanzó en 2013 con un proyecto de ley nacional de talles que nunca se trató en la Cámara de Diputados, por lo que el tema se cayó, y hasta el momento solo existen normas provinciales, en Buenos Aires, Santa Fe, Santa Cruz, Corrientes, Entre Ríos y Mendoza, entre otras.

«El diez por ciento de las adolescentes en la Argentina sufren trastornos alimenticios. Y un tercio de las chicas sienten presión por sentirse lindas», explicó Sharon Haywood, representante de la Organización No Gubernamental Anybody.

Alicia Hernández, gerente general de la Federación Argentina de la Industria de la Indumentaria y Afines, celebró que el proyecto «avance con la normalización de talles y marcas».

A su turno, Fernando Grasso, secretario de Industria de la Nación, impulsó la sanción de una Ley de Talles y sugirió confeccionar un «sistema que se adapte a los cánones de Defensa del Consumidor y de las Leyes Antidiscriminación». En ese sentido, mencionó que la legislación suplantaría el «control del stock» que es «muy difícil de llevar a cabo».

El director de la Cámara Argentina de la Indumentaria, Cristian Urbinatti, reconoció, por su parte, que las empresas «fabrican más indumentaria de ciertos talles que son los que más se venden».
«No crean que alguien va a hacer algo que no va a vender. No crean que la imagen vaya a ser más que la venta de indumentaria», aseguró Urbinatti.