Por Luz Marina Fornieles Sánchez- Especial para Conclusión desde La Habana

Cuba recibió este fin de semana la cifra de tres millones de visitantes internacionales en 2016, con  39 días antes que en 2015,  de acuerdo con información oficial ofrecida por el Ministerio de Turismo (Mintur) de la mayor de las Antillas.

El país refuerza su posicionamiento en el escenario turístico mundial, pese a la persistencia del bloqueo económico, comercial y financiero que mantiene Washington sobre La Habana, con daños para todas las esferas de la vida social cubana, entre ellas su floreciente industria del ocio.

Este resultado representa un crecimiento acumulado de 12%, con lo cual el destino cubano refuerza su posicionamiento en el escenario turístico mundial, pese a persistir casi intacto el bloqueo económico, comercial y financiero, que mantiene ya por más de media centuria Washington sobre La Habana.

Ello ha sido posible gracias a la labor de los trabajadores del turismo cubano, a la cooperación de múltiples sectores de nuestra economía, al acompañamiento de los colaboradores internacionales, y muy especialmente al apoyo constante de nuestro Gobierno y de nuestro pueblo, protagonistas del desarrollo del giro en el país, según agrega nota del Mintur.

Tal incremento en la cifra de visitantes internacionales significa un compromiso por alcanzar resultados superiores en su gestión, a trabajar por la mejora y diversificación continua del producto local para el ocio y a elevar la calidad en el servicio que se presta. El objetivo máximo es el de incrementar los resultados para lograr un mayor aporte al desarrollo nacional y al bienestar del pueblo, concluye la comunicación del organismo cubano.

El desarrollo del Turismo en Cuba dificulta bloqueo

El turismo en Cuba experimenta severas afectaciones a consecuencia del bloqueo impuesto por Estados Unidos, aseguró Maribel Pérez Pérez, especialista en Relaciones Internacionales del ministerio del rubro.

De acuerdo con esa fuente autorizada se estima, que de no existir el bloqueo, la Isla caribeña recibiría anualmente entre 1.5 y 2.5 millones de vacacionistas norteamericanos. A pesar de la prohibición a los ciudadanos estadounidenses de hacer turismo en la ínsula, hasta la fecha se registra el ingreso de más de 350 mil visitantes de esa nacionalidad amparados bajo alguna de las 12 licencias permitidas por el Departamento del Tesoro de EE.UU.

Pérez explicó que esa nación es el principal mercado emisor de vacacionistas al Caribe con poco más de 14 millones en el último año, y si al menos el 15 por ciento pudieran visitar Cuba se estaría hablando de más de 2 millones de personas con una media de gastos de 900 dólares per cápita.

El abastecimiento al turismo constituye otra de las afectaciones registradas en el sector a consecuencia de la criminal política, porque es imprescindible acceder a mercados lejanos, como Asia y Europa,  para garantizar los suministros al ramo.

La especialista señaló que Cuba tampoco puede acceder a campañas publicitarias internacionales, porque la mayoría de las compañías son o cuentan con acciones estadounidenses, por tanto, la Isla debe promocionarse con empresas de menos renombre o por esfuerzos propios.

A consecuencias del bloqueo en el período abril de 2014 a igual mes del 2015, las pérdidas ocasionadas al Turismo se estiman  en 73 millones 416 mil 529  dólares, monto equivalente  al  programa  inversionista  de  la industria cubana para el 2014.

Considerado un sector estratégico para la reanimación de la economía autóctona, la actividad local sin chimeneas cuenta para su evolución con más de 60 mil habitaciones, 10 aeropuertos internacionales, una empleomanía bien capacitada e ingresos anuales por más de dos mil millones de dólares. Los principales mercados son Canadá, EE.UU., Reino Unido, Francia, Alemania, España y por Latinoamérica, México y Argentina.

Se espera que al cierre de diciembre entrante se supere con creces la cuantía de 3,5 millones de viajeros reportados en 2015, dado que por estas fechas ya vinieron tres millones, una parte de los cuales se encontraba ya en el país, cuando éste fue azotado cruelmente por el huracán Matthew por el extremo más al este de su región oriental, donde, por suerte y gracias a las previsiones, no hubo que lamentar pérdidas de vidas humanas.