Por Elisa Soldano

Más de 550 historiadores publicaron un comunicado en donde acusaron al presidente Javier Milei de “manipular” la historia, y advirtieron sobre los peligros que esto implica para la sociedad. Por ello, los profesionales invitaron a que la ciudadanía tome posición y recordaron que “el autoritarismo siempre encontró resistencias”.

“En su retórica agresiva, clasista y regresiva, el presidente Javier Milei apela reiteradamente a la historia. Señala un supuesto momento dorado del pasado argentino al que ubica, de manera para nada azarosa, antes de 1916 (cuando la participación democrática se amplió a partir de la Ley Sáenz Peña sancionada en 1912). Resulta insostenible la referencia al más alto PBI del mundo y la condición de potencia mundial de la Argentina, con la que vocifera en sus discursos, para sostener una interpretación decadentista de nuestra historia nacional”, advirtieron los profesionales.

Y agregaron: “Tergiversa y manipula el significado histórico de figuras como Alberdi o Roca, apela a descalificaciones con reminiscencias dictatoriales para quienes no piensan como él (“comunistas”, “zurdos”, “populistas”), y convoca a un Pacto de Mayo sin relación alguna con los valores y la historia de la revolución de 1810. Pero va más allá. Enmarca su misión histórica en la mitografía bíblica mesiánica recurriendo a argumentos teocráticos, misóginos y esotéricos. Relativiza de una manera inhumana las consecuencias del terrorismo de Estado, envalentonando a la corriente negacionista o apologista de la dictadura militar”.

Milei ante la historia argentina by Conclusión TV on Scribd

Uno de los firmantes del documento, el Doctor en Historia y Director de la Maestría en Estudios Latinoamericanos y del Caribe en la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Gustavo Guevara, detalló ante Conclusión: “El presidente hace alusión a una edad dorada basada en el modelo agroexportador, donde hubo un crecimiento económico por el ingreso de divisas, pero eso estuvo muy lejos de convertirnos en la primera potencia del mundo, como calificó Milei”.

Al ser consultado sobre cómo se distribuía el ingreso entre fines del siglo XIX e inicios del XX, el historiador apuntó: “Argentina era un país muy poco poblado y, producto de las exportaciones, tenía un PBI alto. Hay un informe de Bialet Massé, publicado en 1904, que muestra cómo un país que exportaba y generaba millones en términos de divisas, internamente sometía al grueso de la población a condiciones de vida que eran realmente indignantes”.

Por otro lado, Guevara advirtió que el Pacto de Mayo propuesto por el presidente a los gobernadores no tiene nada que ver con el espíritu de 1810: “La Revolución de Mayo tuvo que ver con una recuperación de la soberanía, de que los habitantes de este suelo asuman en sus manos el Gobierno. Y lo que proponen estas medidas neoliberales es que el libre mercado dirija el destino del país, entonces hay que someterse a los grandes monopolistas”. 

En relación a la postura negacionista que algunos integrantes de La Libertad Avanza toman con respecto a la última dictadura cívico militar, el historiador consideró: “En todo conflicto siempre hay dos voces, pero no siempre son equivalentes o iguales. En Argentina, en 1985, existió un juicio a las Juntas Militares y quedó demostrado que existió un plan de exterminio y que los responsables máximos eran los jefes de ese gobierno de facto. La dictadura fue derrotada por dos razones fundamentales. Una tiene que ver a que ellos negaban lo que hicieron, y la otra gran crisis estuvo relacionada con la Guerra de Malvinas”.

Por último, Guevara analizó qué antecedentes históricos encuentra en las políticas que se están llevando adelante y qué resultados prevé: “La historia es cambio permanente, pero da una perspectiva que permite advertirnos de determinadas cosas que sucedieron en el pasado. Puede existir un protocolo anti-piquetes para que la gente no salga a protestar cuando están violando un derecho, pero son medidas transitorias que no podrán detener la lucha de los trabajadores”.