El Papa convocó a seis monjas benedictinas de la Abadía de Santa Escolástica, ubicada en Victoria (diócesis de San Isidro, dentro de la jurisdicción de la diócesis de San Isidro, en la provincia de Buenos Aires), para que habiten en el monasterio (en los jardines del Vaticano) donde vivió Benedicto XVI hasta su muerte, quienes generosamente aceptaron la invitación del Santo Padre.

El Monasterio Mater Ecclesiae, situado en el corazón de los Jardines Vaticanos, que durante casi diez años fue el hogar del papa emérito Benedicto XVI, volverá a ser lugar un lugar de residencia para las órdenes contemplativas, «para sostener al Santo Padre en su preocupación diaria por toda la Iglesia, mediante el ministerio de la oración, la adoración, la alabanza y la reparación, siendo así una presencia orante en el silencio y soledad«: así se lee en un comunicado difundido por la Oficina de Prensa del Vaticano, que anuncia que el Papa Francisco tomó esta decisión, expresada en una carta manuscrita fechada el 1º de octubre de este año.

Para ello, el Papa Francisco convocó a las monjas de la Orden Benedictina de la Abadía de Santa Escolástica, ubicada en Victoria (dentro de la jurisdicción de la diócesis de San Isidro, en la provincia de Buenos Aires), quienes generosamente aceptaron la invitación del Santo Padre.

Las seis monjas que, conforme a los Estatutos de la Orden, formarán la comunidad monástica comenzarán a vivir en el monasterio los primeros días de enero.

Asimismo, Francisco dispuso que la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano sea la responsable de todo lo referido al monasterio Mater Ecclesiae. Fue San Juan Pablo II, con el Breve La vita contemplativa del 25 de marzo de 1994, quien erigió canónicamente un monasterio de monjas de vida contemplativa en la Ciudad del Vaticano, con el nombre de Mater Ecclesiae.

Benedicto XVI había expresado su deseo de residir allí después de su histórica dimisión del 11 de febrero de 2013 y, por ello, pasó allí los últimos años de su vida, asistido por sus colaboradores y acompañando a la Iglesia en la oración hasta su muerte, ocurrida el 31 de diciembre de 2022.