Los ataques de colonos israelíes contra palestinos y sus propiedades en la Cisjordania ocupada aumentaron durante los meses de confinamiento para contener el avance del coronavirus, según un informe publicado este martes por la ONG Oxfam.

El estudio, basado en cifras de la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA), resalta el notable incremento (37%) de ataques durante marzo y abril, marcados por las severas restricciones para evitar la propagación de la Covid-19, en relación a los que se habían registrado en los meses de enero y febrero.

«Estos ataques ignoran las restricciones al movimiento impuestas por el Ministerio de Sanidad israelí y socavan los esfuerzos tanto israelíes como palestinos en la lucha contra la pandemia», señala el informe, que denuncia también el alto grado de impunidad con el que cuentan los colonos.

La mayoría de los ataques registrados durante el confinamiento (136 entre el 5 de marzo y el 30 de abril) consistieron en daños contra tierras o vehículos de palestinos y menos de un 15% de ellos causaron heridos.

En lo que va del año, por otra parte, se han registrado un total de 68 ataques de palestinos contra colonos israelíes en territorio cisjordano, informó la agencia de noticias EFE.

Además de los mencionados ataques por parte de civiles, la ONG denunció que, a pesar del compromiso del Ministerio de Defensa israelí de detener la demolición de viviendas de palestinos, se obligó a sus propietarios a derribar o se incautó 40 propiedades, lo que provocó el desplazamiento forzoso de 26 personas y afectó a otras 260.

«Lamentablemente, los palestinos están siendo desalojados y sus hogares destruidos con mayor frecuencia durante la pandemia de la Covid-19», expresó Shane Stevenson, director de la oficina de Oxfam para los territorios palestinos ocupados, para añadir que «familias inocentes quedan en estado de vulnerabilidad, especialmente cuando deberían permanecer en casa y mantener su salud».

Durante los meses de confinamiento por la pandemia, el gobierno israelí desalojó seis estructuras en los alrededores del asentamiento de Yitzhar, en el norte de Cisjordania, y aprobó la construcción de 7.000 nuevas residencias en la colonia de Efrat.

Esto se produce, además, en el marco de la probable anexión de territorios cisjordanos que el gobierno israelí de Benjamín Netanyahu quiere impulsar en la segunda mitad de este año, prevista en la iniciativa de paz de Estados Unidos para la región, rechazada abiertamente por los palestinos.

Con unos 250 fallecidos por coronavirus y más de 16.450 infectados, Israel ha superado la fase más crítica de la pandemia y estas últimas semanas levantó muchas restricciones en un proceso ininterrumpido para recuperar su rutina y actividad económica.

En ese marco, una semana atrás, comenzó a transitar una nueva fase del esquema de desescalada de las medidas de confinamiento con la apertura de escuelas y guarderías.