El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, afirmó este lunes que el acuerdo sobre el techo de deuda alcanzado anteanoche con el líder de la mayoría republicana en la Cámara de Representantes del Congreso, Kevin McCarthy, está listo para que se debata en la Cámara Baja, instando a los legisladores a aprobarlo.

«El presidente McCarthy y yo hemos alcanzado un acuerdo presupuestario bipartidista que evitará la peor crisis posible: un impago por primera vez en la historia de nuestra nación», señaló el mandatario estadounidense.

Biden indicó que «este acuerdo es una buena noticia para el pueblo estadounidense», e instó «encarecidamente» a ambas cámaras a que lo aprueben.

«Sigamos avanzando en el cumplimiento de nuestras obligaciones y en la construcción de la economía más fuerte de la historia», exhortó.

El acuerdo alcanzado entre republicanos y demócratas -de la Cámara de Representantes y la Casa Blanca- fue la culminación de intensas negociaciones a lo largo de la semana, sin embargo, todavía queda que todos los legisladores aprueben los detalles del acuerdo en la votación de la cámara.

McCarthy dijo que la Cámara votará sobre la legislación el miércoles, dando tiempo al Senado para considerarla antes del 5 de junio, fecha límite que puso la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, para que la medida sea aprobada por la Cámara de Representantes, que ya trabaja contrarreloj para dar «luz verde» al texto final y que sea firmado por Biden cuanto antes.

Yellen alertó anteriormente de que no llegar a un acuerdo sobre el techo de la deuda provocaría «una catástrofe económica y financiera» que desencadenaría una recesión mundial y amenazaría con socavar el liderazgo estadounidense.

Los detalles del acuerdo se dieron a conocer este domingo en forma de un proyecto de ley de 99 páginas que suspendería el límite de deuda de la nación hasta 2025 para evitar un incumplimiento federal y limitar el gasto público.

El acuerdo mantendría el gasto no relacionado con la Defensa prácticamente estable en el año fiscal 2024 y lo aumentaría en un 1 % el año siguiente, además de suspender el límite de deuda hasta enero de 2025, después de las próximas elecciones presidenciales.

Para el próximo año fiscal, el proyecto de ley coincide con el presupuesto de defensa propuesto por Biden de 886 mil millones de dólares y asigna 704 mil millones para gastos que no son de defensa.

El proyecto también requiere que el Congreso apruebe 12 proyectos de ley de gastos anuales o enfrentará un retroceso en los límites de gastos del año anterior, lo que significaría un recorte del 1%.

Biden y McCarthy están tratando de ganarse a los legisladores para evitar un incumplimiento que sacudiría la economía global.

Sin embargo, el Congreso examinará y debatirá la legislación, que también incluye disposiciones para financiar la atención médica de los veteranos, cambiar los requisitos de trabajo para algunos beneficiarios de ayuda gubernamental y simplificar las revisiones ambientales para proyectos de energía.

El mandatario estadounidense explicó a los periodistas que «es un paso adelante realmente importante» porque no solamente «elimina la amenaza de un impago catastrófico», sino que «protege la recuperación económica que tanto nos ha costado conseguir» y «representa un compromiso»

«Nadie ha conseguido todo lo que quería, pero esa es la responsabilidad de gobernar», señaló.

Por otro lado, negó que hubiera dado marcha atrás en su promesa de no negociar el techo de deuda porque las negociaciones se han limitado a «cuestiones de gasto para llegar al techo de deuda».

«Quieren intentar que parezca que he hecho concesiones sobre el techo de deuda. No es así. Hice un compromiso sobre el presupuesto», aseguró.

McCarthy, que habló este domingo con Biden por teléfono, publicó el texto íntegro del proyecto de ley, que aumenta el límite de deuda durante los dos próximos años.

Entre varias disposiciones, fortalece los requisitos de trabajo en los programas de ayuda pública y rescinde los fondos de Covid-19 que no se utilizaron.

«Este acuerdo de límite de deuda responsable reduce el gasto general, reduce el gasto no relacionado con la defensa y reduce el déficit, a diferencia de cualquier aumento del límite de deuda en la historia reciente», subrayó McCarthy.

Asimismo, afirmó que este proyecto de ley «hace lo que es responsable para nuestros hijos, lo que es posible para un gobierno dividido y lo que exigen nuestros principios».

«La resolución republicana ha logrado este cambio transformador», aseguró.