Este martes, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Brasil confirmó las cifras definitivas de las elecciones presidenciales del pasado domingo, que mostraron un triunfo de Jair Bolsonaro por 46,03% seguido por Fernando Haddad, con el 29,28%.

No obstante, mientras se palpita el balotaje del 28 de octubre, es interesante poner la lupa en el Congreso y en los cambios que tendrá de cara a la próxima gestión.

Uno de los datos más llamativos, según un estudio del portal G1, del canal O Globo, es que 241 de los 513 miembros de la Cámara baja (47%) son millonarios, ya que declararon un patrimonio neto superior al millón de reales (270.000 dólares). No obstante, si bien la cifra es alta, es incluso menor que la acual, donde los representantes con esta condición son 248.

El más rico es el paulista Luiz Flavio Gomes, del Partido Socialista de Brasil (PSB), que declaró 119 millones y asegura estar en contra de la financiación irregular de la política.

De igual manera, un dato preocupante es el nivel de representatividad del parlamento. Según el informe, cuyos datos son obtenidos de las propias cifras del TSE, sólo un 26,8% de las bancas serán ocupadas por personas de raza negra (afrodescendientes y mestizos, o “pardos y pretos”) y nada más que el 15,15% será ocupado por mujeres.

Según estudios realizados a nivel nacional, un 55,9% de la población brasileña es de raza negra (47,15 % pardos y 8,8 % pretos), sin embargo, de 1.656 cargos a cubrir entre senadores y diputados, sólo 444 pardos y pretos fueron electos.

Incluso, pese a su discurso de extrema xenofobia, por el lado de Bolsonaro estarán 42 personas de raza negra, mientras que por el lado del PT hay 40.

En cuanto a las mujeres, en el Senado seguirán siendo 13, mientras que en la Cámara de Diputados habrá 77, unas 16 más que la gestión anterior. No obstante, la cifra es extremadamente baja, siendo un país donde más de la mitad de la población es de sexo femenino.