El gobierno de Francia expresó hoy un panorama desolador sobre la seguridad en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro de inminente inicio, al recomendar a los turistas de su nacionalidad que adopten medidas especiales de protección ante el riesgo de ser asaltados y hasta asesinados, debido a la ola de violencia que sacude a la ciudad brasileña.

«Río de Janeiro es una ciudad que presenta riesgos para la seguridad» de los turistas extranjeros, señala una cartilla redactada por las autoridades francesas.

Unos 500.000 viajeros extranjeros son esperados en la Ciudad Maravillosa para asistir al mayor evento deportivo del mundo, que se iniciará dentro de 11 días con una ceremonia en el legendario Estadio Maracaná.

El presidente francés Francois Hollande es uno de los invitados especiales para esa fiesta de apertura que será acompañada por miles de millones de telespectadores de todo el planeta.

Otra de las recomendaciones para los visitantes franceses es que no salgan a la calle solos puesto que de ese modo se convertirían en blanco fácil de asaltantes.

La situación de la seguridad es «horrible» reconoció hace dos semanas el alcalde carioca, Eduardo Paes, en entrevista a la cadena norteamericana CNN.

Tampoco es recomendable, refiere el comunicado difundido por Ansa, que los franceses lleven joyas o relojes ni contraten automóviles para viajar por el país.

Los accidentes de tránsito y el accionar de los piratas del asfalto hacen que en las carreteras brasileñas la «tasa de mortalidad sea particularmente elevada», alerta.

Las calles de Río ya fueron reforzadas con numerosos integrantes de las Fuerzas Armadas y tropas del Ejército, de la Marina y de la Fuerza Aérea patrullan desde anoche los lugares clave y más susceptibles de atentados, como estaciones de tren, puntos de distribución de agua y energía y centrales nucleares.

La operación marca el inicio de las acciones del Ministerio de Defensa durante los Juegos que comenzarán el 5 de agosto ante el temor de hechos de violencia.

Las Fuerzas Armadas utilizarán 12 navíos, más de 1.600 vehículos, 70 coches blindados, 28 helicópteros, 50 embarcaciones de pequeño y mediano porte y 174 motocicletas, reportó EFE.

Las autoridades brasileñas reforzaron sensiblemente los operativos de seguridad después del aumento de alerta sobre posibles ataques terroristas por parte de lobos solitarios durante la competición que recibirá al menos 45 Jefes de Estado.

Días atrás, 11 personas, presuntamente vinculadas a grupos terroristas islámicos, fueron detenidas en diez estados y se encuentran en una cárcel de máxima seguridad.