Israel bombardeó este sábado una escuela para desplazados de la ONU en el norte de la Franja de Gaza, en el marco de su ofensiva contra el movimiento islamista palestino Hamas, y realizó incursiones en la zona sur del enclave, donde ya murieron casi 9.500 personas.

El Ministerio de Salud de la Franja de Gaza, bajo control de Hamas, informó de un nuevo ataque en una escuela de la ONU convertida en refugio para desplazados en el campo de refugiados de Jabaliya, mientras crecía la indignación internacional por el bombardeo fuera de un hospital contra una caravana de ambulancias.

«La masacre de la escuela Al Fakhura perpetrada por el ocupante israelí esta mañana dejó 15 mártires y 70 heridos», informó el vocero de la cartera de Salud en la Franja de Gaza, Ashraf al Qidreh.

Este viernes último, un bombardeo contra otra escuela convertida en refugio para desplazados en el norte de la Franja dejó 20 muertos y decenas de heridos, según el movimiento islamista.

El jueves pasado, la ONU había anunciado que cuatro de sus escuelas en la Franja de Gaza, que acogían a desplazados de la guerra, habían sido alcanzadas por bombardeos, que causaron la muerte de 23 personas.

El ejército israelí informó que ha «intensificado» sus operaciones, casi un mes después del inicio de la guerra desencadenada tras el ataque lanzado por Hamas el 7 de octubre en territorio israelí que dejó 1.400 muertos, en su mayoría civiles, y en el que el grupo islamista capturó a unos 240 rehenes, entre ellos una veintena de argentinos.

Tras el ataque, Israel lanzó bombardeos contra la Franja de Gaza, en los que murieron ya casi 9.500 personas, entre ellas unos 3.900 niños, y hace más de una semana el Ejército comenzó una ofensiva terrestre en el norte del enclave palestino, donde aseguró que tiene rodeada desde el jueves la ciudad de Gaza.

Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) dijeron este sábado que durante la madrugada llevaron a cabo una «incursión limitada» en el sur de la Franja de Gaza, en preparación para una nueva etapa de la guerra.

La operación, ejecutada por las fuerzas de ingeniería de combate y tanques, consistía en trazar mapas de edificios y limpiar la zona de artefactos explosivos colocados, precisaron las FDI, que indicaron que durante la operación las tropas se encontraron con una célula de Hamas que salió de un túnel y las tropas bombardearon a los agentes y los mataron.

En el marco de su guerra contra Hamas, Israel ordenó a los habitantes del norte del empobrecido enclave, donde viven unas 2,3 millones de personas, que se trasladen hacia el sur.

Sin embargo, el secretario general de la ONU, António Guterres, consideró que «ningún lugar es seguro» en Gaza, en reacción al ataque israelí contra un convoy de ambulancias que el viernes dejó 15 muertos y 60 heridos, y en el que insistió en la necesidad de un alto el fuego.

La Media Luna Roja palestina dijo que «el convoy consistía en cinco ambulancias», entre ellas una del Ministerio de Salud del territorio palestino controlado por Hamas y otra de la misma ONG.

De acuerdo con la Media Luna Roja, el bombardeo se produjo a una distancia de dos metros de la entrada del hospital y una segunda ambulancia fue atacada «a cerca de un kilómetro del hospital», causando varios heridos.

Israel admitió que bombardeó una ambulancia en la ciudad de Gaza justo delante del hospital Al Shifa, el mayor de este territorio palestino, pero afirmó que era «usada por una célula terrorista de Hamas». «Enfatizamos que esta zona en Gaza es una zona de guerra. Los civiles son llamados reiteradamente a evacuar hacia el sur», declaró.

El movimiento islamista tildó de «mentiras» las afirmaciones israelíes y aseguró que la ambulancia formaba parte de un convoy que transportaba «varios heridos para ser hospitalizados en Egipto».

El Ejército israelí acusó la semana pasada a Hamas de «librar la guerra desde los hospitales» de la Franja de Gaza, algo que el grupo islamista niega.

Según el Ministerio de Salud de Hamas, 16 de los 35 hospitales de la Franja de Gaza se encuentran fuera de servicio, algunos porque fueron bombardeados y otros porque no tienen combustible para hacer funcionar sus generadores.