Líderes cristianos de diversas Iglesias, entre ellos el papa Francisco y el patriarca ortodoxo de Rusia, Kirill, advirtieron hoy que las «hostilidades en Medio Oriente» agravadas tras el bombardeo a Siria «amenazan con convertirse en un conflicto global», y convocaron a los líderes mundiales a «evitar una escalada de tensiones».

«Las constantes hostilidades en el Medio Oriente, que en los últimos años han causado un inmenso sufrimiento, cobraron la vida de muchos miles de personas y causaron la huida de millones de refugiados, ahora amenazan con convertirse en un conflicto mundial», denuncia el comunicado conjunto.

El texto, que reclama a «los países de las Naciones Unidas, y en particular a los miembros del Consejo de Seguridad» que «superen sus desacuerdos y trabajen juntos por la paz en el mundo», fue «acordado durante una comunicación telefónica entre el papa Francisco y el Patriarca Kirill de Moscú y toda la Rusia»; según divulgó hoy el sitio web de la Iglesia ortodoxa rusa.

Además advirtieron que «claramente, los horrores de las guerras mundiales del siglo pasado difícilmente pueden compararse con las nefastas consecuencias de una guerra mundial en la actualidad».