El Ministerio de Salud de Brasil notificó esta noche 48.105 nuevos casos, con los que los contagios totales del país suman 1.496.858 casos confirmados en el país, cuyas principales regiones, entre ellas la más afectadas, como Río de Janeiro y Sao Paulo, continúan en plena fase de desescalada, mientras que el número de fallecidos en Brasil contabilizó este jueves 1.252 más y ya suma 61.884.

Por su parte, la alianza de medios de comunicación surgida en contraposición a la falta de transparencia que le achacaron al presidente, Jair Bolsonaro, durante la crisis sanitaria, ha informado de 1.501.353 casos acumulados, tras los últimos 47.984, mientras que las muertes fueron cifradas en 61.990, después de sumar 1.277, informó Europa Press.

San Pablo, la región más afectada por la pandemia en Brasil, anunciará en las próximas horas la posibilidad de reabrir centros culturales, como cines y teatros, antes de lo previsto en algunos municipios del estado que ya se encuentran en el color amarillo del semáforo epidemiológico, entre ellos la Región Metropolitana, aunque lo previsto era hacerlo cuando lograsen estar en color azul.

Río de Janeiro, la segunda ciudad más afectada por la pandemia en Brasil y con una tasa de mortalidad tres veces mayor al promedio del país, habilitó este jueves la reapertura de restaurantes, bares y gimnasios para reactivar la economía del municipio, mientras Itabuna (sur de Bahía) debe postergar una medida similar por tener completa la capacidad hospitalaria.

La relajación de las medidas de confinamiento busca hacer frente a las consecuencias de las decisiones implementadas para mitigar la propagación del nuevo coronavirus y revertir la abrupta caída en el nivel del desempleo en Río.

El municipio registra una población de 6,32 millones de habitantes y la tasa de mortalidad de Covid-19 en los últimos cuatro meses fue de 104,7 por cada 100.000 habitantes, un poco más de tres veces el promedio brasileño, que es de 29 por 100.000 habitantes.

«Espero que no tengamos una recaída y que no tengamos que volver atrás. Pero la economía sufrió un impacto enorme y estamos con un nivel de desempleo gigantesco», afirmó el alcalde Marcelo Crivella, quien aspira a ser reelegido en las elecciones de noviembre próximo.

Además, es la única ciudad en toda Sudamérica que ya autorizó el campeonato profesional de fútbol y tiene previsto abrir los estadios al público el 10 de julio próximo.

La situación no es la misma en Itabuna, municipio ubicado al sur del estado de Bahía y que permanece en confinamiento desde marzo.

Las actividades comerciales allí comenzarían hoy pero al registrar el 100% de la capacidad hospitalaria ocupada, el alcalde Fernando Gomes decidió postergarla para el próximo 9 de julio «muera quien muera».

«Entonces, con la duda y con los nuestros muriendo por una cama en Itabuna, transferiré esa apertura (del comercio). Ordené publicar el decreto el día 8, para que el día 9 abra, muera quien muera», señaló Gomes.

La declaración del alcalde se viralizó a través de un video y tras las críticas recibidas, la Municipalidad divulgó un comunicado señalando que se habían «malinterpretado» sus palabras.

Itabuna, que registra 2.637 infectados de Covid-19 y 58 muertos, tiene 200.000 habitantes y solo 30 camas para atención de pacientes con el nuevo coronavirus.

El nordeste es una de las regiones más empobrecidas de Brasil, así como una de las más afectadas por la enfermedad, con cerca de 500.000 infectados y 20.000 muertos, prácticamente la tercera parte del total del país.