La orden fue dada por el magistrado Teori Zavascki del Tribunal Supremo tras aprobar una medida solicitada por la Fiscalía de ese país en la que se pedía el alejamiento de Cunha de su cargo como diputado y jefe de la Cámara Baja del legislativo brasileño.

Cunha se encuentra imputado por su implicación en el escándalo de corrupción de la Operación Lava Jato. Además, es el principal promotor del pedido de juicio político contra la mandataria Dilma Rousseff.

Cunha también es enjuiciado por la comisión de ética de la Cámara de Diputados por mentir sobre la tenencia ilegal de cuentas bancarias en el exterior. La demanda fue presentada el martes ante el STF por el partido Red Sostenibilidad, fundado por la ex-candidata presidencial Marina Silva.

El STF de Brasil autorizó el 26 de abril la apertura de dos nuevas investigaciones contra el actual presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, por acusaciones de corrupción.

Cunha fue el encargado de iniciar los trámites para el pedido de juicio político contra la presidenta Dilma Rousseff. El político brasileño ya tiene tres procesos en marcha en la máxima corte del país, según fuentes oficiales.

De aprobarse el juicio político como la mandataria brasileña, Cunha estaría en la línea de sucesión de la presidencia del país suramericano.

Brasil es escenario de un golpe blando, como lo califican analistas internacionales, a través de un proceso de juicio político que puede ser aprobado en un Senado de mayoría opositora.