El juez Luiz Antonio Bonat de Curitiba halló culpable al ex presidente de la Cámara de Diputados de Brasil, Eduardo Cunha, por haber solicitado y recibido coimas en contratos para la construcción de navíos sonda de la petrolera estatal Petrobras.
El ex-legislador enfrenta acusaciones de corrupción pasiva, lavado de dinero, ocultamiento de cuentas en el extranjero abastecidas con dinero ilegal de Petrobras, abuso de poder y realización de maniobras para obstaculizar investigaciones.
Por lo pronto, anunció que revelará toda la trama secreta que terminó en la destitución de Dilma Rousseff. Sus procesos pasan ahora a la Justicia federal.
Algunos de ellos ya fueron juzgados y condenados pero apelaron las sentencias. Las sospechas alcanzan al jefe de congresistas del gobierno interino de Michel Temer, quien fuera sugerido para ocupar el cargo por el presidente de la Cámara, Eduardo Cunha.
"Solamente mi renuncia puede ayudar a estabilizar la Cámara", presidida en forma interina por el legislador Walter Maranhao, quien no cuenta con el apoyo de los diputados, declaró Cunha.
Organizaciones sindicales y sociales como el Movimiento de los Sin Tierra y la Central Única de los Trabajadores convocaron al "Día Nacional de Paralización y Movilizaciones Contra el Golpe".
El presidente de la Cámara de Diputados de Brasil, Eduardo Cunha, fue suspendido este jueves provisionalmente de su cargo, por su implicación en el caso corrupción de Petrobras.
Fue revelado por Fernando Soares, uno de los detenidos por su responsabilidad en el gigantesco escándalo de corrupción de la petrolera, quien aceptó colaborar con la Justicia.