Momentos de tensión se vivieron durante el mediodía de este viernes en la zona de San Luis y Laprida, frente a un edificio de la comunidad hebrea, cuando una denuncia alertó por un supuesto “coche bomba” estacionado frente a una institución israelí. Sin embargo, y tras exhaustivas revisiones policiales, se constató que en la camioneta en cuestión no había material explosivo.

Pero a pesar de la falsa alarma, fue detenido un hombre de 48 años que era propietario de la camioneta Toyota Hilux blanca en cuestión. El sujeto se encontraba realizando trabajos de plomería en un departamento de la zona junto a su hijo de 14 años y, según dijo a Conclusión su hermano, fue perseguido por la policía por vestirse con pantalones anchos y largos, gorra y tener barba larga, como indica la religión islámica a la que adhiere.

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En diálogo con los medios, entre ellos Conclusión, el jefe de la Unidad Regional II, Daniel Acosta, apuntó: “A las 11 horas ingresó un llamado avisando que esta camioneta que estaba estacionada había sido observada, hace aproximadamente dos semanas, frente a otra sede hebrea en una actitud sospechosa. En ese momento, cuando personal policial se acercó, el vehículo se retiró raudamente. Había cuatro o cinco personas en su interior”.

En este sentido, Acosta indicó que personal de explosivos revisó el vehículo con resultado negativo, mientras que luego –y bajo la conducción de la Policía Federal– se requisó un departamento donde el conductor de la camioneta  estaba realizando trabajos de plomería.

“Se está revisando el lugar para que nos quedemos tranquilos de que no hay ningún elemento peligroso. Hasta ahora la requisa del domicilio es negativa, pero ni bien terminen se liberará la calle”, aseguró el jefe policial, ya que el tránsito en la zona se encuentra cortado desde poco antes del mediodía, provocando desvíos en el transporte.

Por su parte, el hermano del detenido, Mauricio Roso, manifestó a este medio: “Vino a trabajar. Vive en Mendoza, pero es nacido en Rosario, criado en una familia católica, después le gustó el Islam y se convirtió. Obvio que es por eso que lo están apuntando”.

Y agregó: “Estaba haciendo tareas de plomería, cambiando caños de desagüe de una cocina y de un lavadero. Siempre fue plomero. Lo acusan porque andan con ropa musulmana. Me da miedo mi sobrino más que mi hermano, que tiene 14 años. Mi hermano es grande y sabe defenderse”.

Al ser consultado sobre la situación judicial de su hermano, Roso indicó: “Está detenido y dicen que no lo van a soltar y van a allanar su departamento”.

En relación a las denuncias que aseguran que el detenido habría circulado en situación sospechosa por otra sede hebrea semanas atrás, el familiar consideró: “Cuando viene por Rosario pasea, busca lugar donde estacionar. Hace tres días que viene estacionando en esta zona”.