Una resolución del juez federal N° 1 de Rosario, Gastón Salmain, produjo el virtual cierre de una pyme rosarina: dejó 261 trabajadoras y trabajadores de la empresa Bronway en situación de despido y más de 1.200 familias de empleo indirecto en idéntica situación.

La fábrica de la tabacalera Bronway Technology SA, asentada en el barrio Nuevo Alberdi de Rosario, produce los cigarrillos Dolchester y Pier, que se distribuyen en todo el país.

La novedad judicial vino de la mano de un fallo del magistrado Salmain, que llegó a Rosario en junio pasado y “desempolvó extrañamente”, según afirman desde la pyme, una denuncia interpuesta en 2021 por la poderosa multinacional Massalin Particulares, que comercializa marcas como Marlboro y Philip Morris, por ejemplo, y decidió darle curso exprés.

Mientras la resolución, que según Bronway “favoreció escandalosamente” al gigante norteamericano, es tratada en la Cámara Federal de Rosario en cabeza de los jueces Silvina Andalaf y Lorenzo Barbará, el magistrado de primera instancia Salmain sacó otro fallo, en el que no sólo le da la razón a Massalin, sino que además le ordena a la AFIP que no le otorgue a Bronway las estampillas necesarias para la venta de cigarrillos. Es decir: el juez cierra la fábrica sin esperar la definición de sus superiores.

Darío Ippolito, presidente del directorio de Bronway Technology SA, explicó que ya denunció penalmente a Salmain ante el Juzgado Penal Federal N° 4 por el delito de prevaricato.

«La resolución que sacó este miércoles la habíamos adelantado una semana atrás mediante un escrito a la Cámara Federal. Ya sabíamos que iba a emitir este fallo, porque fuimos víctimas de una extorsión. Lo denunciamos penalmente y vamos a pedir un jury con todos los fundamentos», describió Ippolito.

Conclusión se acercó hasta la planta ubicada en el barrio Nuevo Alberdi y dialogó con Rodrigo Piaggio, encargado de ventas para profundizar sobre el conflicto. «Un juez que nombraron hace dos meses en el juzgado Federal de Rosario nos saca una resolución en primera instancia sin esperar una confirmación de Cámara, pidiendo que no nos entreguen más estampillas básicamente cerrando la fábrica«.

«El conflicto se da porque es un producto de calidad y es más accesible, y las multinacionales presionan desde ese lugar. Las mismas tienen poder, y al ser capitales extranjeros hacen fuerza y meten todas estas denuncias falsas, dicen que no pagamos impuestos y demás para querer cerrarnos a nosotros. En definitiva para quedarse con la cuota de mercado que nosotros hoy tenemos».

La labor de años se ve reflejada en el producto final. «En este tiempo a fuerza de trabajo y producto hemos logrado imponernos con una buena marca, de buena presentación. Por ello, pedimos competencia en igualdad de condiciones».

El presidente del directorio de Bronway Technology SA, Darío Ippolito, continúo sobre el fallo, «Este juez llegó a Rosario con la instrucción de cerrar nuestra fábrica. Creemos en la Justicia, quiero a este país y por eso voy a seguir. Voy a ir a declarar a cuanto juzgado me convoquen para que se llegue a la verdad, ya que tengo todas las reuniones documentadas», disparó acerca de la denuncia por prevaricato.

«¿Cómo es posible que yo supiera lo que iba a resolver el juez Salmain una semana antes y cuando este magistrado estaba de vacaciones? No soy adivino y lo que resolvió no era previsible ni por el mejor abogado del planeta, lisa y llanamente porque es una barbaridad. Lo sabía porque me lo avisaron, pero ya me voy a explayar en el lugar que corresponda», siguió Ippolito sobre el escrito que había presentado Bronway ante la Cámara.

El ejecutivo evaluó sobre esta última resolución de Salmain: «Ni Massalin se había atrevido a solicitar esa medida, ya que pidió una multa. El juez se aparta inclusive de lo pedido por Massalin y cierra la empresa, y además le pide a AFIP que no entregue estampillas, todo esto mientras la causa se tramita en la Cámara y con una cautelar prorrogada por la jueza Sylvia Aramberri», que avala el funcionamiento de la empresa, tal como sucede con otras pymes en el resto del país.

Ippolito manifestó angustia e impotencia al tener que notificar a 261 familias que se quedarán sin su sustento, y se preguntó cómo es que, incluso en época electoral, ningún sector de la política se interesó por la suerte de trabajadoras y trabajadores.

«No entiendo cómo la Justicia en este país se convirtió en la mano de obra de los intereses más oscuros», definió el empresario.

«Este jueves ingresó a la Cámara Federal de Apelaciones un escrito donde le recordamos a los magistrados que lo sucedido ya había sido avisado, y rogamos que los jueces de un tribunal superior, que sabemos honrados, salven las fuentes de trabajo y coloquen las cosas en su lugar», añadió Ippolito.

Mientras tanto, diversas organizaciones gremiales comenzaron con una serie de acciones de visibilización de la crisis laboral, en apoyo a los empleados de Bronway, que provoca este nuevo fallo judicial.

QUIÉN ES SALMAIN

El juez Gastón Salmain había obtenido el tercer lugar en el órden de mérito para el cargo de juez federal multipropósito N° 1 de Rosario, recordaron desde Bronway y a la vez informaron que se desempeñaba previamente en el estudio jurídico “Servini y Asociados”, de titularidad de un familiar directo de la influyente jueza de Comodoro Py, Maria Laura Servini de Cubría.

El nombre de Salmain ya había sido objetado en 2018 y en 2022, cuando concursó para un puesto similar en la ciudad entrerriana de Concordia por irregularidades relacionadas con su examen y su actividad vinculada a reajustes jubilatorios.