Organizaciones sociales Federación de Organizaciones de Base, la Asamblea Trabajo y Dignidad, Unión de Trabajadores de la Economía Popular, marcharon en todo el país, para exigir al Gobierno nacional el abastecimiento de alimentos a comedores comunitarios, que se multiplicaron en los últimos años y para repudiar la avaricia de los grandes supermercadistas formadores de precios.

En ese sentido, Fernando Corregidor, referente de la Federación de Organizaciones de Base (FOB), explicó que la jornada se realiza con la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) con el objetivo de visibilizar la falta de entrega de alimentos secos por parte del gobierno nacional a comedores y merenderos, y en contra de la escalada de precios. «Nos preguntamos que van a poner las familias en las mesas de navidad y año nuevo si no se toman medidas más duras en este sentido», expresó.

La jornada se llevó adelante este martes en 9 provincias. En Salta, se realizaron manifestaciones en supermercados de la ciudad y en el interior provincial. En tanto, en Rosario, la protesta se ubicó en el supermercado de capitales franceses de Pueyrredón entre Santa Fe y Córdoba.

Corregidor aseguró que hay 10 millones de personas en todo el país que asisten a comedores o merenderos, y la demora en la entrega de los alimentos secos que otorga el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación afecta al funcionamiento de los lugares. Además, el acceso a los alimentos frescos «es cada vez más imposible» con la constante suba de precios.

El referente de la FOB consideró que las medidas tomadas por el gobierno nacional sobre el congelamiento de precios, consideró que es acertada pero insuficiente. «Hay una falta de comunicación y accesibilidad, en términos de poder acceder rápidamente a una lista», indicó y agregó: «Hay un camino o una mirada que consideramos acertada, que es el congelamiento de precios, porque estamos en una situación muy grave humana, social y económica, incluso a niveles como en el 2001, y está bueno que se realicen estas medidas pero se quedan cortos en la efectivización».

Además, indicó que optan por la movilización para poder discutir y disputar las formas en las que se enfrenta la crisis, y poder sentarse con los funcionarios a cargo. Corregidor remarcó también que «no todo se resuelve desde un criterio en la Ciudad de Buenos Aires».

El referente consideró que se nota la reactivación económica post – pandemia, pero que «es lenta» para llegar a toda la población, y el hambre no espera.

«Está el desafío de también construir otras alternativas, no solo pensando en el contexto nacional sino en lo cotidiano y en nuestras ciudades y provincias. Los gobiernos provinciales y municipales tienen una responsabilidad en también generar políticas que tiendan a reducir la desigualdad y el hambre. Tenemos que pensar acá que hacemos, y cómo lo hacemos, y a partir de eso tener una mirada nacional, sino pareciera que esperamos que todo se resuelva en Buenos Aires», dijo.