Tranquilidad es el sentimiento de varias madres tras el fallo de la Justicia de Rosario que les permite el autocultivo de cannabis medicinal para sus hijos. Lo dictaminó la Sala A de la Cámara Federal de Rosario, por resolución de los jueces Fernando Lorenzo Barbará, Aníbal Pineda y Élida Isabel Vidal.

De esta manera, las seis madres irán a la Corte Suprema con la tranquilidad de que en el mientras tanto no estarán cometiendo ningun delito al cultivar en su domicilio.

Si bien “hay mucha gente” que usa el producto en la ciudad, este fallo afecta a solamente a las seis madres que se encuentran involucradas en la causa.

En junio pasado la Cámara Federal de Apelaciones de Rosario revocó una medida cautelar otorgado por la jueza Sylvia Aramberri a las mujeres que las autorizaba a cultivar cannabis para producir el aceite medicinal. Hoy volvió todo al principio y podrán seguir cultivando hasta que resuelva el supremo tribunal.

“Nos sacamos un peso de encima”, dice Carina Prietto, una de las madres, en diálogo con Conclusión. “En el tiempo que transcurre entre que resuelve nosotras podemos acopiar y hacer aceites”, explica.

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El fallo es como lo dispuso la doctora en un primer momento. Es el único caso a nivel nacional que llega a la Corte Suprema.

“Es un alivio que tiene que ver con la familia”, comemtó. La mujer también contó que como seguían dandole aceite de cannabis a los chicos, se encontraban incumpliendo la decisión de la Justicia, lo que a partir de hoy no ya no ocurre. “Eso nos ponía en una situación de riesgo jurídico y penal”, describe.

Si el fallo era negativo “perdíamos el circuito que teníamos armado de los médicos, científicos, Facultad. Volvemos a ser libres. No tenemos la sensación de estar expuestos a una causa”, remarca.

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A su vez, la mujer destacó la repercusión social que tuvo el tema. “Este fallo tiene que ver con cómo se viralizó el tema, tuvo mucho acompañamiento de la gente”, consideró.

“Agradezco a los camaristas porque vamos a transitar este camino tranquilas, sin el sentiemiento de persecución y miedo”, finalizo Prietto.

Desde el grupo también piden regulación por parte del Estado. “Nosotros pedimos que tambien el Estado esté presente supervisando lo que uno hace, y que acompañe con políticas de salud, preparar médicos para que lo puedan recetar. Que se regule de manera seria, que sea sólido, que no sea solamente desde un lugar comercial”.